El matrimonio de Gema y Joaquín está pasando por un buen momento: han decidido intentar ser padres. ¿Lo conseguirán?
Superadas las crisis del pasado, Gema y Joaquín viven un dulce momento en el matrimonio y también los Merino a nivel familiar, por ello, tienen las hormonas de al felicidad revueltas… ¡Y eso les hace hacer pequeñas locuras!
Gema ha pasado por el despacho de la fábrica para ver a su marido, y ambos se han liado entre beso y beso… ¡Hasta que Joaquín ha cerrado con llave el despacho!
El matrimonio se encontraba a punto de ponerse manos a la obra con un beso de lo más pasional cuando Luis ha llegado y les ha interrumpido. ¡Menudo momento para los tres! Ninguno sabía dónde meterse…
Lo que está claro es que la sintonía entre Joaquín y su esposa ha vuelto, y mejor que nunca.
