Antonio Orozco ha sido el artista invitado en la tercera gala de El Desafío y ha participado en un reto con Genoveva Casanova. Han estado juntos sobre el escenario para interpretar ‘Devuélveme la vida’, él cantando y ella al piano, regalándonos un momento mágico.
Cuando el jurado ha valorado el reto, Santiago Segura ha señalado que la idea original era que el pianista acompañase a Orozco cuando, en la práctica, ha sido al revés, desatando las risas sobre el escenario.
Por ello, Orozco ha querido señalar algo que “seguro todo el mundo se ha dado cuenta”. El artista vio a Genoveva Casanova muy concentrada al piano, y un movimiento muy atrevido de la concursante generó un problema de coordinación entre ellos.
“Ha dejado de mirar el teclado y se ha puesto a mirarme a mí”, ha comentado Orozco ante la risa de Genoveva Casanova, relatando el momento en el que le pedía, mientras actuaba, que siguiese tocando el piano.
“Creo que ahí ha habido esa descoordinación de cuatro acordes”, ha señalado el artista, para después valorar el gran esfuerzo y trabajo que ha realizado Genoveva Casanova. ¿Tú te habías dado cuenta? ¡Dale al play y revive este momentazo!