El Athletic Club desaprovechó una oportunidad de oro para poder meterse incluso en la pelea por la liga y de fortalecer aún más su ya asentada posición de Liga de Campeones al ser incapaz de marcar un gol al Leganés, que aguantó estoico el asedio rojiblanco y además hasta pudo ganar el partido.
Pudo llevarse los tres puntos el conjunto ‘pepinero’ si hubiese entrado alguno de los dos balones al palo que mandaron Miguel de la Fuente y Munir El Haddadi en una segunda mitad en la que también el argentino Julián Chicco gozó de un uno contra uno ante Unai Simón, que impuso en la jugada su categoría internacional.
No obstante, el partido fue de los de Ernesto Vaverde, que sometieron sobremanera a los de Borja Jiménez con una treintena de remates, hasta 16 saques de esquina y media docena de buena ocasiones.
Pero ninguno de dos equipos marcó, el Athletic se queda a nueve puntos del líder Real Madrid, a cinco del segundo, el Atlético Madrid, y con una ventaja de seis sobre el Villarreal. El Leganés, por su parte, se escapa a tres puntos del descenso.
De salida, Valverde introdujo hasta siete cambios en el equipo, los seis de la estructura defensiva y la vuelta de Iñaki Williams al once, con Sancet también de regreso tras lesión pero de inicio en el banquillo. Borja Jiménez, por su parte, apostó por Juan Cruz de carrilero y dio entrada a Brasanac a un once sólido y que fue capaz de aguantarle el pulso en la primer mitad a un Athletic que salió decidido a por el partido pero al que le faltó tino y fortuna en las buenas ocasiones que tuvo.
En concreto, tres claras. Tres remates en el área en los que a Vivián, Guruzeta y Berenguer les faltó finura en sus remates en los minutos 8, 25 y 45. La volea de Vivián al borde del área, a saque de córner fue muy buena, aunque desviada.
Más deficientes fueron los cabezazos de sus compañeros. El de Guru, estético y a un precioso centro de Yeray, se fue alto; y el de Berenguer, picado, a bocajarro y al borde del área pequeña, a un centro también buenísimo de Gorosabel, se estrelló en el cuerpo de Dmitrovic.
No fueron las únicas oportunidades de las que gozó el Athletic, que no paró de provocar córneres, hasta seis, ni de buscar las cosquillas a la nutrida defensa rival de cinco hombres por los costados con los Williams y por el medio con la hiperactividad de Berenguer. El ‘Lega’, aún dándoles el balón y la iniciativa a los locales, controlaba bien el juego y, cuando la tenía, la posesión sin precipitarse.
Si acabó movida la primera mitad con el cabezazo de Berenguer, la segunda arrancó a mil y con un ritmo trepidante de área a área donde planearon tanto el 1-0 como el 0-1.
Nada más empezar, a los 17 segundos, Vivián salvó el tanto del Leganés en un balón que despejó a la desesperada que iba a rematar Brasanac después de que entre Yuri, Yeray y Unai Simón se liasen ante Miguel de la Fuente. Respondió el Athletic con tres ocasiones, dos disparos de Berenguer y uno de Jauregizar. El más peligroso el último de Berenguer, que se resbaló en el primero.
No se arredró el Leganés y por segunda vez pudo adelantarse en el marcador. Un cabezazo al palo de Miguel a un centro preciso de Raba. A partir de ahí, con Yuri ayudando a Nico Williams por la banda izquierda, ya todo durante un buen rato fue asedio del conjunto rojiblanco, aunque sin claridad en la zona decisiva. Donde percutieron una y otra vez sin éxito prácticamente todos los ‘leones’.
Los que tuvieron más opciones fueron Yuri, en una falta al borde de la línea que estrelló en la barrera, y Vesga, en un centro de Berenguer que le cogió mal asentado. Esa dinámica casi de desesperación del Athletic y de resistencia numantina del Leganés en choque se fue diluyendo.
No obstante, aún tuvieron una doble ocasión los blanqiazules. Primero un disparo lejano de Munir que se estrelló en el larguero y en la jugada posterior un mano a mano de Chicco con Simón en el que se impuso el meta internacional.
Y todavía tuvo otra clarísima el Leganés, un cabezazo de Sergio González, a centro de Oscar, que se le marchó desviado al delantero. Al Athletic se le fueron las últimas esperanzas en un cabezazo mal conectado de Williams, un disparo flojo de Serrano y una caída de Sancet que el árbitro no consideró sancionable.