El seleccionador español de balonmano, Jordi Ribera, no ocultó su decepción por la derrota (25-24) encajada este miércoles ante Noruega y que obligará a los Hispanos a ganar sus dos próximos compromisos ante Portugal y Brasil para poder acceder a los cuartos de final del Mundial de Croacia, Dinamarca y Noruega.
«Hemos perdido una gran oportunidad y ahora habrá que remar», señaló Ribera que no dudó en achacar la derrota a los problemas ofensivos que sufrió el conjunto español en la segunda mitad.
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«En el segundo tiempo hemos estado muy atascados en ataque y eso ha permitido que Noruega estuviese siempre cerca. Cuando se han puesto por delante nos han entrado las prisas. Con todo hemos tenido la última bola para, al menos, empatar, pero no hemos tenido la misma suerte que el día de Suecia», explicó el preparador, en declaraciones difundidas por la Federación Española.
Dificultades ofensivas a las que se sumaron los problemas que tuvo el equipo español par contener el ataque con siete jugadores de campo por el que apostó Noruega en los últimos veinte minutos y que permitió a los nórdicos los hasta cinco goles de ventaja (14-19) con los que llegaron a contar los Hispanos.
«Ellos han encontrado una solución ahí, pero creo que nuestros problemas han estado especialmente en ataque, nos ha costado muchísimo encontrar situaciones de gol, generar acciones de desequilibrio que nos habrían permitido administrar esa ventaja de cuatro o cinco goles», indicó Ribera.
Una derrota que no impedirá al equipo español seguir dependiendo de sí mismo para acceder a unos cuartos de final, aunque para ello deberá ganar el viernes a Portugal y el domingo a Brasil, en dos choques en los que como recalcó Jordi Ribera el equipo deberá mejorar, sobre todo, en la parcela ofensiva.
«Hay que mejorar, sobre todo, en ataque, donde hoy no hemos estado bien, y no perder la concentración defensiva que es donde poco a poco el equipo ha ido creciendo», concluyó el seleccionador español.