Ha sido cuestión de minutos. Apenas Donald Trump acababa de jurar el cargo como presidente de EEUU, se suspendía de facto el programa de inmigración que proveía de una vía legal para tramitar la entrada al país, la única para la gran mayoría de solicitantes. Las autoridades fronterizas estadounidenses dijeron que se habían cerrado el programa de entrada legal que había aprobado el presidente saliente Joe Biden y que había estado vigente hasta que Trump jurara el cargo. Todas las citas existentes fueron automáticamente canceladas, según informó la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CPB, por sus siglas en inglés).
Las citas se pedían a través de la aplicación móvil CBP One. Era la única forma de conseguir audiencia con las autoridades para exponer la necesidad de solicitar asilo, que había permitido a cientos de miles de personas entrar legalmente en EEUU. Al cerrar la app y la web y cancelar las citas, la administración Trump ha cogido la puerta trasera, usando un bloqueo tecnológico en vez de una acción legal. Toda una declaración de intenciones sobre la agresividad de su posición antiinmigración y pasa a la acción incluso antes de que el presidente electo tuviera tiempo de salir del Capitolio y firmar una serie de órdenes ejecutivas récord (más de 100) que prometió para hoy mismo.
Los solicitantes cuyas citas han sido canceladas, tras esperar durante meses su turno, han recibido la noticia con shock por ver cómo la citación desaparecía de sus pantallas. Lo han confirmado las autoridades mexicanas — ya que la espera para la cita se hace en territorio mexicano. Las reacciones de desesperación han sido inmediatas.
De un sistema carente a uno inexistente
Para conseguir ser admitido en el país, los solicitantes de asilo debían acudir, hasta el lunes a mediodía, a los llamados “puertos de entrada” (puestos fronterizos) con una cita previa para iniciar la petición de asilo, que solo se puede iniciar desde suelo estadounidense. Pero no solo eso: además, la cita solo se puede pedir desde las inmediaciones de la frontera, y solo se concedían 1.450 citas al día y la app y la web se colapsan a diario. Toma entre 8 y 11 meses conseguir que te reciban, según estimaciones oficiales.
El cierre de la aplicación forma parte de una serie de medidas de la administración entrante para reprimir la frontera, a pesar de que la migración ha disminuido significativamente en los últimos seis meses. Según cifras de la CBP, los funcionarios estadounidenses interceptaron 96.048 extranjeros en la frontera en diciembre de 2024. Aproximadamente la mitad, 48.722, se presentaron en un puerto de entrada para obtener la admisión formal en Estados Unidos.
