Glovo asume que su nuevo modelo de flotas de repartidores asalariados no estará operativo íntegramente en toda España hasta, como pronto, julio de este año. El pasado 3 de diciembre, un día antes de que su consejero delegado, Óscar Pierre, declarara ante el juez por presuntamente emplear durante años falsos autónomos, la compañía anunció que iniciaba un proceso de transición para dejar de operar con repartidores por cuenta propia.
Glovo ha manifestado su intención de contratar o subcontratar a parte de los 15.000 mensajeros que hoy en día reparten a través de su aplicación en España. Fuentes conocedoras del proceso de reconversión de la compañía explican que a partir de febrero la transición irá cogiendo velocidad. No obstante, también reconocen que al menos hasta julio no es factible que la empresa de mensajería deje de operar totalmente con autónomos y que durante los próximos meses cohabitarán ambos modelos.
Fuentes oficiales de la empresa consultadas por este medio ni confirman ni desmienten dichos plazos. Explican que para medir la velocidad de la transición están todavía a expensas de que la Inspección de Trabajo les notifique las actas infractoras que ha ido recabando sobre su modelo desde agosto del 2021. Según el Ministerio de Trabajo, dicha regularización dará de alta a unos 60.000 repartidores, en algún momento entre agosto de 2021 y diciembre del 2024. Varios riders implicados ya han ido recibiendo los avisos de alta de oficio por parte de la autoridad laboral, según ha podido comprobar ese medio. No obstante, Glovo formalmente todavía no tiene las notificaciones de las actuaciones, según sostienen desde la compañía.
Una vez Glovo conozca exactamente a cuántos riders la autoridad laboral le obliga a reconocer, será entonces cuando empiece a planificar con más detalle cuántos se queda en nómina y cuántos despide. El nuevo modelo de flotas asalariadas al que transitará Glovo no precisará del mismo número de mensajeros. Ahora tiene muchos, pero parte de ellos empleados de manera muy intensiva durante muy pocas horas, las de mayor demanda. Ahora necesitará un número menor, pero que hagan más horas para cubrir los costes fijos del contrato.
El modelo de subcontratas no convence
Parte del colectivo de repartidores querría seguir como autónomos, parte querría tener un contrato de asalariado con garantías, pero lo que genera un escepticismo bastante extendido es el modelo de flotas subcontratadas, que se erige como alternativa a las flotas de autónomos que repartían hasta ahora para Glovo. Principalmente, porque el sueldo habitual es el salario mínimo interprofesional y los horarios son a tiempo parcial y concentrados en fines de semana y festivos, coincidiendo con los mayores picos de demanda de la comida a domicilio.
Las flotas subcontratadas son empresas que aglutinan a decenas o centenares de repartidores -según su tamaño- y les emplean como asalariados. Luego le ofrecen el servicio a Glovo -o a Uber Eats o Just Eat, que ya trabajan con este modelo- y los repartidores entregan pedidos de Glovo, pero están a sueldo de esa segunda empresa. En los portales de ofertas de trabajo circulan periódicamente vacantes para este tipo de flotas.
Closer Logistics, por ejemplo, tiene operativa en Barcelona, Madrid, Sevilla o Málaga, entre otros, y ofrece contratos de 30 horas semanales, en turnos de cenas 5 días a la semana por un salario de hasta 900 euros mensuales. Otra subcontrata que está en el circuito de reparto y opera actualmente para Uber es Gliders Force e históricamente ETT más grandes, como Randstad, han participado también de este negocio.
Otras ofertas se mueven por circuitos más informales, como grupos de Facebook, donde perfiles con poca actividad previa en la red publicitan contratos de ocho horas al día, en turno partido y de jueves a domingo y festivos, por el equivalente al salario mínimo, es decir, 1.323 euros brutos al mes (en 12 pagas).
Ante el anuncio de cambio de modelo de Glovo, los actores de su ecosistema de reparto se están reubicando para seguir en el negocio. Es el caso de una de sus gestorías oficiales, Easy Rider. Esta la recomienda directamente Glovo a través de su página web a los repartidores autónomos que operan en su app para que les lleve los trámites y la documentación de autónomos. La misma mandó el pasado diciembre una notificación a sus clientes informándoles que había constituido «una empresa de reparto para poder trabajar con el nuevo modelo», según recoge la misiva a la que ha tenido acceso este medio.
Just Eat es la única compañía del sector que ha ido aumentando su plantilla de repartidores directamente contratados. Este jueves ha anunciado la renovación de su acuerdo de empresa, firmado con CCOO, UGT y Fetico, para garantizar unas condiciones laborales mínimas a sus 2.500 riders en plantilla. Acuerdo que rubricó por primera vez en 2021 y que pretendía ser la antesala de un convenio colectivo del sector del delivery que, por el momento, no existe.