El Gobierno lanzará un Comité de Inversiones Estratégicas, un nuevo órgano que tendrá por finalidad atraer grandes inversiones y proyectos empresariales en España, en un intento por imitar la ‘ventanilla única’ de las comunidades autónomas, a través de la denominación de «proyectos de interés económico estratégico» a este tipo de inversiones.
Así lo ha anunciado Pedro Sánchez en el foro Spain Investors Day, donde ha explicado que este organismo estará dedicado a identificar necesidades en áreas estratégicas y a orientar las prioridades en sectores como la transición verde o la digitalización.
«El nuevo comité permitirá acelerar los proyectos de mayor impacto y relevancia para la economía y el territorio», ha explicado Sánchez. La finalidad de esta ‘ventanilla única empresarial’ es satisfacer las necesidades de los inversores, quienes reclamaban una agilización en los trámites sin tanta burocracia de por medio. Así, la idea del Ejecutivo pasa por que este comité se centre en grandes inversiones que requieran de ser ejecutadas por la vía rápida, replicando la estrategia de otros países que incentivan así las inversiones externas. El organismo, propuesto por la Oficina Económica de Moncloa, dependería del paraguas de Presidencia del Gobierno.
«La mejor economía del mundo»
La intención de Sánchez no es otra que «volver a ser la mejor economía del mundo en 2025″, según ha expresado, refiriéndose al honor concedido por The Economist a este respecto. Siguiendo con los indicadores macroeconómicos, también ha hecho referencia al empleo: «Tenemos más empleo que nunca, con un tejido productivo modernizado y con una tasa de temporalidad que es la mitad que en 2018», ha expuesto.
Continuando con su discurso en el foro, Sánchez habló de los «tres pilares» con los que quiere desarrollar su modelo económico, entre los que citó la «modernización del tejido productivo, la situación financiera del país y la apertura de la economía exterior». «En un momento en que las principales economías del mundo están en repliegue, España quiere abrirse al mundo«, ha dicho sobre el tercero.
«Los inversores muestran una extraordinaria confianza en las potencialidades de nuestra economía, lo que sitúa a España en el top 10 mundial», ha defendido, lo que a su juicio es posible por factores como «la energía limpia y barata, la facilidad de acceso a capital humano o la seguridad del país».
«Queremos que España sea un país para los inversores, pero también un buen país para el conjunto de la ciudadanía. Porque frente a la crisis financiera, crear riqueza y compartirla son compatibles, y son dos pedales de una misma bicicleta que nos lleva a un mismo horizonte, el desarrollo de nuestras sociedades», ha argumentado.
No obstante, aunque el discurso ha sido meramente económico, Sánchez también ha querido lanzar algunas consignas sociales. «Pero el objetivo no es crecer por crecer. Es importante crecer para progresar y mejorar la vida de nuestros ciudadanos. Si hay sociedad desiguales se genera mayor inseguridad y menos capacidad de progreso. Luchar contra la desigualdad y redistribuir de manera justa los beneficios del crecimiento siempre va a ser una hoja de ruta. Queremos que España sea un país atractivo para los inversores, pero también que sea un buen país para los empresarios y para los trabajadores. Para el conjunto de la ciudadanía en su conjunto”, ha sentenciado.
