La actriz Elisa Mouliaá, quien ha ratificado ante el juez Adolfo Carretero su denuncia contra Íñigo Errejón, ha explicado en su declaración que cuando sufrió el presunto acoso sexual del exdiputado de Sumar iba «muy bebida», al mismo tiempo que apuntó la posibilidad de que le pudiera haber metido algo en la copa, según informan fuentes jurídicas.
Con respecto al motivo por el que tardó tres años en denunciar los hechos, Mouliaá ha resaltado, siempre según las citadas fuentes consultadas, que su psicólogo le dijo que hasta que no estuviese preparada no denunciase. Las denuncias de otras mujeres le animaron a hacerlo.
El titular del Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid citó este jueves a las 11.00 horas a la actriz y presentadora de televisión Elisa Mouliaá, quien denunció haber sido objeto de diferentes agresiones sexuales presuntamente cometidas tres años antes por el exportavoz de Sumar en el Congreso Íñigo Errejón, que deberá comparecer como investigado ante el magistrado a las 12.30 horas.
Dimisión de Errejón
De esta forma, su declaración se ha producido dos meses y medio después de que el 24 de octubre de 2024 Errejón difundiera en sus redes sociales una carta en la que anunciaba su dimisión al haber llegado «al límite de la contradicción entre el personaje y la persona». En la misiva también aludía, aunque de forma imprecisa, a una «subjetividad tóxica» que se multiplicaba por la acción del patriarcado en el caso de los hombres «con compañeros y compañeras de trabajo, con compañeros y compañeras de organización, con relaciones afectivas e incluso con uno mismo». Pero no concretaba ningún caso.
Sin embargo, apenas unas horas después la actriz y presentadora de televisión Elisa Mouliaá hizo público que había sido víctima de una presunta agresión sexual que habría cometido el exdiputado el 22 de septiembre de 2021. Y la misma noche del 24 de octubre de 2024 Mouliaá interpuso una denuncia ante la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional, cuyo relato de hechos, según las fuentes consultadas, podría ser constitutivo de un delito de agresión sexual castigado con penas que van de 1 a 5 años de cárcel.
Adolfo Carretero
Esta denuncia ante la Policía fue cursada por los agentes a los juzgados de Plaza de Castilla en Madrid, y esta recayó en el titular del Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid, Adolfo Carretero, quien pocos meses antes había propuesto juzgar a los comisionistas de las mascarillas encargadas por el Ayuntamiento de Madrid Luis Medina y Alberto Luceño. El juez abrió diligencias y citó a declarar tanto a la propia denunciante como a Errejón.
El relato de hechos indica que después de que llevaran «aproximadamente un año» intercambiando mensajes en redes sociales, Errejón la invitó a la presentación de un libro suyo en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Y tras este evento, la actriz aceptó a participar en una celebración posterior.
Además, la denuncia destaca que el expolítico hizo tocamientos no consentidos a la actriz tras encerrarla en una habitación cuando ambos acudieron a la fiesta, y que ella que le pidió que cesara: «Íñigo, solo sí es sí, parece mentira que me esté pasando esto contigo«, dice el escrito de Mouliaá, en el que especificó que el expolitico llegó incluso a mostrarle «su miembro viril».
Sin embargo, en noviembre pasado el magistrado acordó archivar la causa hasta que la abogada de la denunciante regresase de una baja médica. El juez explicó que Mouliaá se había «negado a designar a otro letrado que la sustituya de su confianza» por lo que «la consecuencia inevitable» era «la imposibilidad de la continuación del procedimiento«. Pero en diciembre el instructor reabrió la causa al estimar los recursos que interpusieron la defensa de Errejón y la Fiscalía.