¿Cuánto cuesta el alcohol en los aeropuertos? Para Ryanair, más de 15.000 euros. Pero no directamente las bebidas del ‘duty free’ o las que se sirven en los negocios de la terminal, sino sus consecuencias.
La aerolínea irlandesa denunció esta semana a un viajero conflictivo que obligó a desviar a Oporto un vuelo entre Dublín y Lanzarote. Hoy ha desglosado estos gastos en un comunicado oficial poniendo el foco en la venta de alcohol que, como ya hizo el año pasado, ha pedido que se limite en los aeropuertos.
El conflicto se remonta a un vuelo del pasado 9 de abril de 2024, cuando el comportamiento de un viajero a bordo obligó a la tripulación a aterrizar en Oporto. Este incidente —aseguran en la compañía— tuvo un coste de más de 15.000 euros que ahora ha reclamado al responsable del desvío a través de una demanda en Irlanda.
Hoy la ‘low cost’ no solo ha desglosado este dinero que le supuso perder con su aterrizaje inesperado en Oporto, sino que ha puesto también el foco en la venta de alcohol en los aeropuertos.
Más de 160 viajeros afectados
«Debido al comportamiento de este pasajero problemático, la aeronave se vio obligada a desviarse a Oporto, donde aterrizó y el pasajero fue desembarcado y detenido. Debido a las restricciones horarias de la tripulación, el avión, la tripulación y más de 160 pasajeros se vieron obligados a pernoctar en el aeropuerto de Oporto, y los gastos de alojamiento y comidas, entre otros, fueron costeados íntegramente por Ryanair. La aerolínea también tuvo que proporcionar un avión y tripulación adicionales para operar el vuelo retrasado de regreso de Lanzarote a Dublín, que tuvo lugar el 10 de abril de 2024», expone la compañía aérea.
Según apunta la aerolínea como resultado directo de este comportamiento problemático del pasajero, más de 160 pasajeros y 6 tripulantes se vieron obligados a desviarse y pasar la noche en el aeropuerto de Oporto, para luego volar a Lanzarote al día siguiente, el 10 de abril de 2024. A renglón seguido, Ryanair desglosa los costes:
- Exceso de combustible: 800 euros
- Alojamiento de pasajeros y tripulación: 7.000 euros
- Tasas de aterrizaje/handling en el aeropuerto de Oporto: 2.500 euros
- Pérdida de ventas a bordo: 750 euros
- Costes de sustitución de la tripulación: 1.800 euros
- Tasas legales portuguesas (hasta la fecha): 2.500 euros.
La venta de alcohol, en el punto de mira
Tras esta aclaración de los costes que tuvo este desvío a Oporto por el pasajero conflictivo, la aerolínea apunta que «no se habría incurrido en ninguno de estos costes si este pasajero conflictivo no hubiera forzado un desvío a Oporto para proteger la seguridad de la aeronave, los 160 pasajeros y los 6 miembros de la tripulación a bordo. Una y otra vez, los Gobiernos europeos no toman medidas cuando los pasajeros conflictivos amenazan la seguridad de los aviones y los obligan a desviarse».
Asegura Ryanair que en este caso, la Fiscalía de Portugal dictaminó que, dado que el avión y el pasajero son irlandeses, el caso debía trasladarse a Irlanda. Por lo tanto, Ryanair ha iniciado un procedimiento civil contra este pasajero ante los tribunales irlandeses para recuperar estos costes, en los que se incurrió total y exclusivamente como consecuencia del comportamiento del pasajero conflictivo.
«Es hora de que las autoridades de la UE tomen medidas para limitar la venta de alcohol en los aeropuertos. Las compañías aéreas, como Ryanair, ya restringimos y limitamos la venta de alcohol a bordo de nuestros aviones, sobre todo en casos de pasajeros problemáticos. Sin embargo, durante los retrasos de los vuelos, los pasajeros consumen alcohol en exceso en los aeropuertos sin ningún límite de compra o consumo. No entendemos por qué no se limita a 2 bebidas alcohólicas a los pasajeros en los aeropuertos (utilizando su tarjeta de embarque exactamente igual que se limita la venta en las tiendas libres de impuestos), ya que esto propiciaría un comportamiento más seguro y mejor de los pasajeros a bordo de los aviones, y una experiencia de viaje más segura para los pasajeros y las tripulaciones de toda Europa», concluyen.