«La carretera ZA-921, de titularidad autonómica, que comunica las localidades de Puebla de Sanabria y Rihonor de Castilla, localidad fronteriza con Portugal, requiere de obras de modernización y acondicionamiento integral en los términos del proyecto aprobado, por ello se impulsará durante la vigencia del presente Plan la ejecución de la citada infraestructura».
Es una de las previsiones del Plan de la Raya que prepara la Junta de Castilla y León, cuyo borrador ha estado expuesto para información pública hasta el 9 de enero y ha recibido 12 alegaciones, algunas de Zamora, como la del alcalde de Puebla y algunos particulares pero la mayoría de los grupos leonesistas, tanto León Propone como Unión del Pueblo Leonés.
La inclusión del arreglo de la carretera supone un cambio claro de postura por parte de la Junta, que insistentemente se había negado a intervenir en esta carretera, pese a ser de su competencia y de que el lado portugués ha aprobado ya un proyecto para la modernización del trazado entre Braganza y Rionor. Alegaba entonces que era el Gobierno central el responsable, ya que se trata de una vía que debe acabar en un puente internacional responsabilidad del Ejecutivo de Pedro Sánchez.
Ahora incorpora una partida de doce millones de euros que varias alegaciones presentadas consideran insuficiente ya que el lado portugués tiene consignados 29 millones y se considera un enlace fundamental que uniría la estación del AVE de Sanabria con el aeródromo de Braganza.
León Propone estima que «también debería incluirse una referencia expresa a las conexiones ferroviarias con Portugal», en concreto «la previsión de una nueva línea de ferrocarril entre Oporto y Zamora, que es actualmente solo una propuesta, iniciativa de la asociación portuguesa Val D´ouro»,aunque «se valoró en la cumbre hispano-lusa de Faro el 23 octubre de 2023, acordándose realizar estudios de movilidad y análisis coste-beneficio para la esta conexión ferroviaria. Incluirla en el Plan socioeconómico de la Raya puede reforzar la reivindicación de este enlace ferroviario».
Senda del lobo
El Plan de la Junta sí contempla 6.800.000 euros para la recuperación de la vía rural denominada «senda del lobo» entre la ZA-P 2640 hasta la ZA-P 1606 (zona de Ungilde-Robledo y estación de Linarejos) y otros 13 millones de euros para carreteras fronterizas tanto de Zamora como de Salamanca.
El Plan de la Raya presentado por la Junta es el prometido por el presidente Alfonso Fernández Mañueco en un mitin de la campaña electoral de 2022 celebrado el Ifeza. Parecía una de esas promesas incumplidas tan habituales de las campañas electorales, pero, aunque ha tardado, se ha presentado ya un borrador a desarrollar en seis años, con una inversión prevista de 83,5 millones de euros en sus seis años de vigencia (Mañueco prometió al menos 40) y que beneficiará a una zona con 175 municipios, 65 de ellos de Zamora y el resto de Salamanca.
Las previsiones
Además de las mencionadas inversiones en carreteras y el desarrollo de la marca La Raya, entre otras cosas para visibilizar a la zona y su desarrollo turístico, el Plan elaborado por la Junta contiene otra serie de previsiones para financiar distintas líneas de actuación.
Una línea es la dotación de suelo industrial, con 20 millones para incentivar la creación de suelo industrial. Además, el Instituto de Competitividad Empresarial de Castilla y León (Icecyl) dará un tratamiento prioritario a los municipios de la Raya en las convocatorias de subvenciones para suelo industrial.
Otra sociedad pública, Sodical (instituto financiero para la competitividad empresarial que depende de la Junta), destinará diez millones a un fondo para la financiación de iniciativas empresariales en la zona de La Raya, tanto de creación de nuevas empresas (capital semilla) como de crecimiento de las existentes (capital riesgo).
En colaboración con la Fundación para el Anclaje Empresarial y la Formación para el Empleo de Castilla y León, habrá ayudas para crear empresa y autoempleo, con tres millones para el inicio de la actividad.
La Consejería Economía y Hacienda apoyará el instrumento «Banco de Proyectos Innovadores», con un millón de euros en incentivos.
El Plan prevé invertir en los elementos singulares del Patrimonio Natural de la Raya, con al menos 400.000 euros, mientras la Consejería de Transformación Digital destinará medio millón de euros a mejorar los servicios públicos, el desarrollo de servicios digitales y la capacitación de la población en nuevas tecnologías.
Para las medidas del Eje de Cohesión Territorial se prevé una inversión de 16,8 millones: la mitad (8,4 millones) los pone la Junta y la otra mitad, a partes iguales (4,2 millones), las diputaciones de Salamanca y Zamora (cuyo presidente, Javier Faúndez, ya ha anunciado que apoyará).
Hay otra serie de medidas de vivienda, desarrollo del comercio rural o creación de oficinas de seguimiento para el buen fin del Plan de la Raya. n
Alegaciones al Plan de la Raya
«Las necesidades de este territorio y los objetivos ambiciosos que se persiguen en el Plan, no se corresponden con la aportación económica de la Junta, que se limita a 75,1 millones de euros en 6 años, lo que supone una media de 71.523,81 euros por municipio y año. A modo de ejemplo de contraste, según los datos del Gobierno sobre el Plan de 130 Medidas frente al Reto Demográfico, la Comunidad de Madrid invirtió 527 millones de euros en lo años 2021 y 2022 en un territorio una cuarta parte inferior al de la Raya y con un declive socioeconómico mucho menor»
Es una de las 12 alegaciones presentadas al Plan de la Raya de la Junta durante el periodo de exposición pública, ésta realizada por León Propone, que considera que «la inversión de la Junta de Castilla y León debería al menos duplicarse en cada una de sus líneas de actuación. Es evidente la escasa cuantía de 12 millones de euros prevista para la carretera entre Puebla de Sanabria y Rihonor, cuando el tramo portugués desde la frontera a la Raya tiene un presupuesto de 29 millones. La previsión de 1 millón para el «Banco de Proyectos Innovadores» parece también insignificante».
La alegación más votada, con 41 apoyos, es la que firma Pepe Fernández, alcalde de Puebla, para quien «en base a estudios sobre esta infraestructura es imposible hacer una carretera de montaña (la de unión con Rihonor) con ese presupuesto. Si no hay mas dinero propongo hacer dos fases, para que quede bien, incluido carril bici». Pide una carretera de seis metros con arcén y carril bici, «como viene del lado portugués» y que se coordine con Portugal.
La siguiente alegación más votada es la de León Propone sobre las conexiones con Portugal, incluida una mención al AVE por Zamora según la propuesta del Val D´ouro.
El Ayuntamiento de Manzanal aboga por la previsión de incendios y otras propuestas que «no suponen una gran inversión», pero que «ayudan a la población existente y futura».
Entre diez y quince votos obtienen tres alegaciones de Unión del Pueblo Leonés que pide el fomento de la reforma de viviendas en localidades pequeñas al margen del programa Rehabitare, fomentar las marcas de calidad agroalimentarias de la Raya y el impulso a la excavación, puesta en valor y señalización de yacimientos de la zona «para incentivar el turismo».
Con 15 votos de respaldo, León Propone insta a «recoger los compromisos concretos en conectividad digital con una inversión adecuada y rápida».
Por su parte, Gema Peña Chimeno firma una alegación en la que pide «centrar el tiro» en acciones para «asentar población desde un modelo coherente con lo que significa vivir en un entorno rural, así como con las personas que allí habitan y sus necesidades específicas».
UPL aboga por el desarrollo de un producto que se llame Raya Ibérica de Salamanca y Zamora, en lugar de Raya Ibérica de Castilla y León, fomentar la «permeabilidad laboral y económica con Portugal» o el «fomento del comercio local de proximidad», además de promover el asentamiento de jóvenes e impulsar la «mejora de infraestructuras y servicios sanitarios».
Antecedentes poco halagüeños
Aunque en Plan de la Raya contiene partidas específicas, muchas de ellas están condicionadas al desarrollo de iniciativas en la zona, lo que hace necesario esperar a que se ponga en marcha para ver si sirve para algo o se queda en otro intento más.
Desde la Operación Integrada de Desarrollo de Aliste y Sayago de los años 80 hasta hoy han sido muchas las iniciativas que formalmente han intentado desarrollar la zona fronteriza, de momento con poco éxito. A veces porque se trata de planes muy genéricos (como parece este caso, aunque habrá que darle en beneficio de la duda) y otras porque el dinero que teóricamente venía para estos lugares, como los fondos Interreg han servido para desarrollar iniciativas en zonas en principio muy alejadas de la Raya, como Valladolid o León, que recibieron dinero como provincias límítrofes.
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