Kylian Mbappé sumará este domingo 27 partidos como jugador del Real Madrid, encuentro en el que el delantero francés podría levantar su tercer título como futbolista blanco. Lo que arrojaría un increíble promedio de ¡un título por cada 9 partidos! Pero además, Mbappé podría marcar en su tercera final, porque ya lo hizo el día de su debut en la final de la Supercopa de Europa ante el Atalanta, y en la final de la Copa Intercontinental ante el Pachuca. En la primera cerró el marcador después de anotar el segundo tanto tras el primero de Valverde. En la segunda ante los mexicanos abrió la lata para que después Rodrygo y Vinicius redondeasen el (3-0) final. El galo es el tercer jugador que marca en sus dos primeras finales con el Madrid en la última década, tras Gareth Bale en 2014 y Marco Asensio en 2017. Mbappé es, de momento, un jugador de finales.
Inicio irregular de temporada
Porque pese a estos datos tan llamativos, la realidad es que el francés no termina de convencer al madridismo. Su desempeño en estos 26 partidos (17 de Liga, 6 de Champions, 1 de Copa, 1 de Supercopa de Europa y otro de Supercopa de España) está aún lejos de ser el del futbolista determinante que anotó tres goles en la final del Mundial de Qatar. Kylian, que se animó a hablar en su primera declaración de llegar a los 50 goles en su primera temporada como madridista, suma 13 tantos y tres asistencias, en los 2.094 minutos que ha estado en el campo durante esos 26 encuentros. Es decir, el francés ha marcado un gol cada 161 minutos, casi un tanto por cada dos partidos. Lejos de las expectativas que tiene depositadas en él la afición y los dirigentes blancos.
De hecho, a estas alturas de la temporada, Mbappé no es el jugador que más goles genera en el equipo, porque Vinicius, que suma los mismos tantos que Kylian (13), ha dado además 9 asistencias. Incluso Bellingham se sitúa a su altura, tras anotar 9 goles y repartir 7 asistencias. Y un escalón por debajo, pero no muy lejos, aparecen Valverde (7 goles y 3 asistencias) y Rodrygo (6 tantos y 4 pases de gol).
Sin pretemporada
Después de un arranque muy irregular de temporada, que probablemente se pueda explicar por la falta de trabajo de pretemporada del galo ya que debutó a los seis días de incorporarse a la plantilla del Real Madrid, Kylian aprovechó las ventanas de selecciones para ponerse a tono. El delantero madridista no fue convocado en octubre por Didier Deschamps porque estaba superando una lesión que sufrió el 23 de septiembre y que le impidió jugar su primer derbi ante el Atlético. Luego en noviembre y en diciembre Deschamps le dio ‘vacaciones’, lo que Mbappé aprovechó para trabajar con los preparadores físicos del Real Madrid en pequeñas pretemporadas diseñadas especialmente para él.
Y eso ha tenido resultado en los últimos partidos en los que se ha visto a un Mbappé con más chispa y aceleración. En la semifinal ante el Mallorca, por ejemplo, Kylian fue el mejor atacante blanco en la primera parte generando sensación de peligro en cada jugada en la que participaba. Ahora el francés tendrá la oportunidad de resarcirse contra el Barcelona del ‘clásico’ de Liga en el Bernabéu en el que el Madrid fue apabullado por el Barça y Kylian pasó sin pena ni gloria por su primer gran partido como delantero madridista.