La investigación de la Guardia Civil por el asesinato del ciudadano norirlandés de 37 años cuyo cuerpo fue descubierto este pasado martes en Rojales se ha ampliado fuera de España ante las sospechas de que el presunto asesino haya huido del país. Fuentes cercanas al caso han explicado a este diario que el ciudadano checo detenido tras el descubrimiento del cadáver no sería el autor material del crimen y que el presunto asesino es otro varón de Irlanda del Norte que conocía a la víctima y que habría huido a Tailandia a raíz de la muerte violenta de John George, de 37 años.
Estas son las sospechas de la familia de la víctima que la Guardia Civil trata ahora de confirmar, para lo que necesitará la cooperación con policías de otros países con el fin de dar con el paradero de este sospechoso. La familia ha afirmado en medios británicos que creen que el asesino es un traficante de drogas de Irlanda del Norte afiliado a la Asociación en Defensa del Úlster (UDA), una organización paramilitar.
La autopsia realizada al cadáver hallado oculto entre unos árboles en una finca de limoneros de Rojales ha revelado que fue asesinado a tiros. Este dato confirma la información facilitada por un testigo del caso, que aseguró que una persona confesó que había matado a tiros a John George. En un mensaje enviado a la familia -publicado por el diario Sunday World-, uno de los sospechosos vinculados a la desaparición de George tras estar en Cabo Roig aseguró que John había recibido disparos y que su cuerpo fue abandonado en algún lugar entre Torrevieja y Benidorm. Esta persona también le dijo a la familia que uno de los sospechosos se había llevado el arma de fuego usada en el crimen para «limpiarla».
En esta misma llamada, la persona asegura que la noche del 14 de diciembre, sobre las 22 horas, Georgie -como era conocida la víctima- salió ileso de su apartamento con otro hombre y unas horas más tarde este último regresó a su vivienda con un arma y confesó haberle disparado: «Georgie no llegó a Benidorm», según lo publicado por Sunday World.
Cadáver identificado
Aunque no había muchas dudas sobre la identidad del cadáver descubierto entre unos árboles en una finca de Rojales, la Guardia Civil ya ha podido identificar por huellas el cuerpo y ha confirmado que corresponde a John George. Además de las huellas, el cuerpo presenta también varios tatuajes que tenía John en diferentes partes del cuerpo, de ahí que no tuvieran dudas de que se trataba del norirlandés desaparecido en la Vega Baja desde el pasado 14 de diciembre, último día que habló por teléfono con su familia en Irlanda del Norte. Su padre le instó a que regresara a casa, pero nunca subió al vuelo que tenía reservado para el día 18.
Por su parte, el padre del hombre asesinado ha difundido en sus redes sociales la identidad de media docena de personas a las que señala como sospechosas de la muerte de su hijo. Entre ellas figuran los nombres del ahora detenido y del varón que se sospecha que ha huido a Tailandia, así como el de la novia de este último, una joven que tiene abierta una cuenta de contenido erótico y porno en Onlyfans. Esta joven publicó también en sus redes sociales, antes de la aparición del cadáver de John, un mensaje donde aseguraba desconocer el paradero del norirlandés desaparecido. Asimismo, desveló que ha recibido «30 amenazas de muerte» desde que les estaban vinculando a la desaparición de John George, con el que estuvieron en Cabo Roig antes de que lo mataran.
El único detenido hasta el momento por su presunta implicación en el homicidio de George continuaba ayer en dependencias de la Guardia Civil y se desconoce si pasará este jueves a disposición judicial en Torrevieja o los investigadores agotarán el plazo legal de 72 horas desde su arresto. No ha trascendido el grado de implicación en el crimen, pero como mínimo se le imputará el encubrimiento de la muerte a tiros de John George.
La familia de John George llegó a ofrecer una recompensa de 30.000 libras por información para encontrar al desaparecido y además abrió una recaudación de fondos para costear el operativo de búsqueda y la repatriación del cuerpo a Irlanda del Norte. La recaudación ya superaba ayer tarde las 27.000 libras. También se ha creado un perfil en Facebook bajo el nombre de «Justicia para John George», que cuenta con 55.700 miembros y donde se han publicado numerosos mensajes de condolencia para la familia de la víctima. El padre de John también ha publicado mensajes de despedida de su hijo y afirma que está destrozado.