El presidente electo de EEUU, Donald Trump, ha desmentido a través de la red social Truth Social la información publicada este lunes en ‘The Washington Post’ según la cual su equipo está explorando un plan para aplicar aranceles a todos los países, pero estos solo afectarían a importaciones “críticas”.
Dos semanas antes de que Trump asuma el cargo, el próximo 20 de enero, sus asesores aún están discutiendo planes para imponer aranceles a bienes de todos los países, según las fuentes consultadas por ‘The Washington Post’. Sin embargo, en lugar de aplicar aranceles a todas las importaciones, las discusiones actuales se centran en imponerlos solo a ciertos sectores considerados críticos para la seguridad nacional o económica, dijeron las personas consultadas, quienes advirtieron que no se han tomado decisiones finales y que la planificación sigue en evolución.
“La historia en el Washington Post, citando a supuestas fuentes anónimas, que no existen, afirma incorrectamente que mi política arancelaria será reducida. Eso es falso. El Washington Post sabe que es falso. Es solo otro ejemplo de noticias falsas”, ha escrito Trump en Truth Social.
Según ‘The Washington Post’, no está claro qué importaciones o industrias enfrentarían aranceles. Las discusiones preliminares se han centrado en gran medida en varios sectores clave que el equipo de Trump quiere traer de vuelta a los Estados Unidos, dijeron las fuentes. Estos incluyen la cadena de suministro industrial de defensa (a través de aranceles al acero, hierro, aluminio y cobre); suministros médicos críticos (jeringas, agujas, frascos y materiales farmacéuticos); y producción de energía (baterías, minerales raros e incluso paneles solares), según dijeron dos de las fuentes.
Tampoco está claro cómo encajan estos planes con la intención expresada por Trump de imponer aranceles del 25% a México y Canadá y un arancel adicional del 10% a China. Para muchos, es poco probable que estas medidas acaben implementándose, pero algunas personas familiarizadas con el asunto dijeron que podrían imponerse junto con aranceles universales a sectores clave, añade ‘The Washington Post’.