Acostumbrado desde hace un siglo a lidiar con las adversidades más oscuras, el Alicante, ajironado hasta decir basta, vuelve a sacar la cabeza. El club celeste cerró 2024 como líder de la Lliga Comunitat, la antigua Preferente pero ahora más potente al quedar reducida a solo dos grupos. Y lo hizo con paso firme, en solitario, dejando a dos puntos (24 por los 26 de su casillero) a sus dos inmediatos perseguidores, el Benigànim y el Hércules B; y lejos de históricos del fútbol autonómico como el Olímpic de Xàtiva.
Al frente de la ilusión por el retorno a Tercera trece años después está el joven técnico José Manuel Ruiz, que cumple su segunda temporada en la entidad de Villafranqueza después de dirigir con solvencia al Santa Pola y al Thader de Rojales durante varios años.
En la presente temporada, el Alicante solo ha perdido un partido de los últimos nueve y se proclamó campeón de invierno el pasado fin de semana después de imponerse al Rojales en el anexo del Antonio Solana y de que el filial del Hércules que dirige Roberto Campillo no ganara en Novelda. Sin embargo, todavía quedan por disputarse dos jornadas para que termine la primera vuelta, una de ellas, suspendida por la dana que azotó a la provincia de Valencia, de donde son siete de los dieciséis equipos del grupo.
Para aguantar el tirón por el ascenso, el Alicante, ahora bajo la batuta del Intercity, ha repescado al delantero alicantino José Alejandro Chacopino, con más de 200 partidos en 2ªB a sus espaldas. Chaco ya disputó las dos últimas temporadas como celeste, pero el pasado verano optó por firmar por el Novelda UD. Ahora, a sus 36 años, se perfila como un complemento perfecto para un Alicante plagado de jugadores sub-23 y de varias nacionalidades.
El Alicante ya fue campeón de Preferente en la 2020-21, con Mario Cartagena en el banquillo, pero se quedó a las puertas de ascender a Tercera tras caer eliminado en el play-off de ascenso contra el Torrellano. Fue su primera oportunidad de regresar a una categoría que no pisa desde la 2011-12, cuando comenzó a caer en un pozo del que cada vez está más cerca de salir. Desde aquella caída libre de la que hubo de resucitar en 2014, el Alicante suma con la presente siete temporadas consecutivas en Preferente, las dos últimas bajo el nombre de Lliga Comunitat.
Los dos campeones de los grupos de la Lliga Comunitat ascienden directamente a Tercera RFEF y la otra plaza se la disputarán los dos segundos y los dos terceros en dos semifinales y su correspondiente final.
Varios de los jugadores con más proyección de este joven Alicante son el zaguero Samu Pastor, Adrián Campillo, Fer Hernández, Javi Valverde o Moha Belayachi, máximo goleador del equipo en este curso con 6 dianas y a solo un tanto del pichichi del grupo, el exalicantinista Juanma Ruano, ahora en el Novelda Unión. El próximo fin de semana (11 y 12 de enero) el Alicante retoma su camino y visitará al Torrevieja con el objetivo de seguir afianzándose en la zona alta de la clasificación.
Irrompible afición
Con un sentido de pertenencia a prueba de bombas, el alicantinismo sigue fuerte, fletando autobuses para ver al equipo dondequiera que juegue, pasando frío y siempre con la incertidumbre metida en el carnet de identidad. En los últimos tiempos salieron más cruces que caras, pero no hay mal que cien años dure.