La eólica vuelve a ser la gran reina del sector eléctrico en España. Los parques de aerogeneradores han sido en 2024 de nuevo la mayor fuente de generación de electricidad en el país en un año récord para las renovables, en el que también las plantas fotovoltaicas entraron en el podio del ránking de producción, según los registros de Red Eléctrica de España (REE), el gestor del sistema eléctrico nacional. Los molinos refuerzan su liderazgo y abren brecha con las centrales nucleares (tradicionales líderes en generación) y con las centrales de gas (que lo fueron durante la crisis energética).
La eólica se pone a la cabeza de la producción por segundo año seguido y por cuarta vez en una década. La energía del viento fue en 2013 la principal tecnología de generación por primera vez en la historia; no volvió a repetir hasta 2021, en pleno arranque de la crisis energética; y lo volvió a hacer en 2023 y también ahora en 2024.
España hizo el año pasado ‘historia verde’ concentrando un 56% de toda su electricidad producida con energías renovables (eólica, solar e hidráulica), seis puntos por encima del anterior récord de 2023, y tras elevar la generación limpia en un 11% en términos absolutos. El imparable ‘boom’ de las renovables también ha provocado un desplome de las emisiones de gases de efecto invernadero de las compañías eléctricas hasta nuevos mínimos históricos, tras un descenso del 20% el año pasado.
Los datos provisionales de REE confirman que las instalaciones eólicas acumularon una producción de en torno a 60.800 gigavatios hora (GWh) en el conjunto del año, concentrando el 23% de la generación, por delante de las nucleares (con un 19,6%), de las plantas de solar fotovoltaica (con un 16,7%) y de las centrales de gas (con un 13,2%), que casi empatan con las hidroeléctricas (con un 13%). La tecnología que mayor incremento de producción registra es la solar fotovoltaica, con un alza del 18%, hasta superar los 44.000 GWh, entrando por primera vez en el podio anual y tras convertirse en la principal fuente de producción de electricidad del país en algunos meses de 2024.
A las puertas de un ‘sorpasso’ histórico
El despliegue masivo de nuevas plantas renovables está provocando un terremoto en todo el sistema de producción electricidad en España, y también lo está haciendo en el juego de pesos que tiene cada energía en la potencia instalada ahora mismo en máximos (con más de 131.000 megavatios, MW, en total). Y es que las grandes plantas fotovoltaicas están a punto de dar un ‘sorpasso’ histórico a la eólica y convertirse en la energía con más potencia instalada del país.
Las instalaciones fotovoltaicas de suelo (sin incluir el autoconsumo de los tejados de viviendas y empresas) cuentan actualmente con una potencia de casi 31.400 megavatios (MW), más del doble en menos de tres años, desde los 15.300 MW solares con que se cerró 2021. Las fotovoltaicas ya adelantaron a las centrales de gas y arrebataron la condición de segunda mayor tecnología por potencia instalada el pasado mayo.
Ahora el ‘boom’ de nuevas plantas solares de suelo se dispone a convertirse en la energía con mayor capacidad del país, desbancando a la eólica, actualmente con parques con una potencia conjunta de algo más de 31.600 MW. Ambas tecnologías verdes crecen, pero el despliegue de la solar es más fácil y está siendo más rápido. Desde el sector energético se da por hecho que el cambio en la cabeza del ránking de potencia es inminente.
Los registros de Red Eléctrica incluyen como potencia de la energía fotovoltaica sólo las plantas solares de suelo (con la única excepción de en torno a 250 MW de grandes instalaciones de autoconsumo que vierten parte de la energía producida a la red). Con carácter general, el autoconsumo no se recoge en esta estadística, porque estas instalaciones se contabilizan formalmente como una forma de ahorro de la demanda energética y no como generación de electricidad.
Si se contabiliza la potencia que suman todas las instalaciones de autoconsumo que hay en el país, la energía fotovoltaica ya es con mucho la energía con mayor capacidad en España. Actualmente en el mercado español hay plantas de autoconsumo en viviendas y empresas con una capacidad de en torno a 8.000 MW, según las estimaciones del sector renovable. Así que el conjunto de la energía fotovoltaica sumaría una potencia de más de 39.000 MW en el país, muy por delante del resto de tecnologías de producción. Pero oficialmente no se contempla así por las diferente categorización estadística que se da al autoconsumo.
Hace falta desplegar más rápido
Desde la Asociación Empresarial Eólica (AEE), la patronal del sector, se advierte de que el ritmo de despliegue y puesta en operación de nuevas plantas es insuficiente para cumplir con los objetivos verdes que se ha marcado España para 2030. Durante 2024 se han activado apenas 800 MW, la mitad del año anterior, según los registros de REE. “España debe acelerar significativamente el despliegue de nueva potencia eólica para cumplir con los objetivos de 2030. La instalación anual está muy lejos de los objetivos que debemos alcanzar, lo que supone impactos múltiples a lo largo de la cadena de valor. Si la eólica no alcanza objetivos, España no cumplirá los suyos”, advierten desde la patronal eólica.
El Gobierno aprobó el año pasado nuevo Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), la actualización de la hoja de ruta para descarbonizar la economía e impulsar las energías limpias durante esta década. Un megaplán verde que eleva los objetivos actuales de despliegue de renovables para llegar a 2030 con una potencia total de 214.200 MW, en la que dominarán las energías verdes, y a través de las que se producirá el 81% de toda la electricidad con fuentes verdes.
Los objetivos marcados por el Ejecutivo pasa por llegar al final de la década con 62.000 MW de eólica en 2030, duplicando en apenas un lustro los cerca de 31.600 MW operativos en la actualidad. Y el plan contempla también alcanzar los también los 76.300 MW de energía fotovoltaica, de los que 19.000 MW serán de autoconsumo, lo que requerirá un despliegue acelerado de nuevas instalaciones desde los 31.400 MW de plantas solares actuales y los en torno a 8.000 MW de autoproducción ya en marcha en viviendas y empresas.