El secretario general de Junts, Jordi Turull, ha reclamado por carta al ministro de Justicia, Félix Bolaños, que no le conceda el indulto que pidió hace unos meses un ciudadano particular. Si el Gobierno aceptara esta petición, que tiene el visto bueno de la Fiscalía, Turull podría volver a presentarse a las elecciones y aspirar a algún cargo público. El número dos de Junts fue indultado en 2021 junto al resto de condenados por el 1-O, pero sigue pesando sobre él una pena de inhabilitación de 12 años por el delito de malversación de caudales.
El mismo particular también presentó una petición de indulto para el resto de miembros del Govern de 2017 que restan inhabilitados, el vicepresident Oriol Junqueras y los exconsellers Raül Romeva y Dolors Bassa.
En la carta dirigida a Bolaños, Turull alega que no quiere que se le conceda esta medida de gracia, al considerar que sería una forma de «blanquear» la no aplicación de la ley de amnistía por parte del Tribunal Supremo. El dirigente posconvergente asegura que este indulto «diluiría» las conductas «rebeldes» de los cinco magistrados que firmaron la resolución contraria a amnistiarle, una actitud que tacha de «claramente prevaricadora», «injustificable» y «arbitraria» y que va en contra de la «voluntad del legislador» al aprobar esta ley la pasada primavera.
Fuentes de Junts aseguran que les consta que la tramitación del indulto estaba ya «muy avanzada», a la espera del informe final del juez del Supremo Manuel Marchena.
Turull siempre se ha mostrado contrario a este indulto. Sin embargo, si el Gobierno decidiera concedérselo no podría rechazarlo. Es por este motivo que, en la carta, el secretario general de Junts pide al Consejo de Ministros que tenga en cuenta su «voluntad expresa» de no obtener esta medida de gracia cuando debata sobre esta cuestión. Turull tiene interpuesto un recurso en el Tribunal Supremo para reclamar la aplicación de la amnistía.