- Consumo saludable y personalizado
- Desestacionalización del producto
- Nuevos sabores de roscón
- Los españoles prefieren el tradicional
El aroma del Roscón de Reyes vuelve a llenar las calles de Madrid, pero este año con una nueva fórmula que está conquistando a los consumidores. Más pequeños, con menos azúcar y adaptados para personas con intolerancias, los roscones artesanos son la estrella indiscutible.
Las pastelerías madrileñas esperan vender 2,9 millones de unidades estas navidades, según la Asociación de Empresarios Artesanos de Pastelería y Panadería de Madrid (ASEMPAS).
Consumo saludable y personalizado
La tendencia hacia un consumo más saludable y personalizado está transformando este clásico navideño. Los roscones de 500 gramos, perfectos para familias pequeñas, lideran las ventas. También gana terreno la reducción en la proporción de azúcar empleada y la elaboración de variedades sin gluten y sin lactosa.
Cada vez más consumidores adquieren el roscón elaborado artesanalmente (sin conservantes, ni otros añadidos) para ingerirlo horas después de su elaboración y su compra.
Desestacionalización del producto
Pero el cambio no se limita al tamaño o a los ingredientes. El roscón ha dejado de ser un postre exclusivo de la víspera de Reyes.
Este año, su presencia en las pastelerías comenzó en noviembre, marcando una desestacionalización que ha impulsado un aumento del 3% en las ventas en la Comunidad de Madrid. Ahora, el roscón se disfruta durante toda la temporada navideña e incluso fuera de ella.
Nuevos sabores de roscón
La innovación también llega a los diseños, con versiones bañadas en chocolate que rivalizan con las tradicionales.
El año pasado, Confidencial Digital contaba en estas páginas que un nuevo e inesperado sabor estaba triunfando: foie gras y trufa, elaborado por Rosconería Bargueño. Esta pastelería madrileña ha ampliado el abanico de sabores tradicionalmente dulces hacia lo salados. Venden incluso variedades de callos y morcilla.
Los españoles prefieren el tradicional
Según un estudio de Amazon Fresh realizado por Ipsos Digital, el 57% de los españoles sigue prefiriendo el clásico relleno de nata o trufa, una tendencia corroborada por un informe de Uber Eats, que señala que siete de cada diez usuarios se decantan por la nata como su favorita.
Sin embargo, lo tradicional no está reñido con el fervor. Tres de cada diez encuestados admiten esperar al menos 30 minutos de cola para hacerse con un roscón artesanal. Las largas filas frente a las pastelerías confirman que, aunque el roscón evoluciona, su lugar como símbolo de las fiestas sigue intacto.