La recuperación de los terrenos del antiguo HUCA parece coger carrerilla con la llegada del año nuevo. Tres días después de que el Principado anunciase la adjudicación de los derribos de sus propiedades en el otrora complejo sanitario, la Universidad de Oviedo comunica que ha conseguido del Ministerio de Inclusión cerrar la cesión por 50 años de los inmuebles que hasta 2014 acogieron las áreas de Maternidad, Silicosis y Consultas Externas. Se trata de tres inmuebles con 46.380 metros cuadrados de superficie construida que serán acondicionados como aulas, oficinas y laboratorios para trasladar a los mismos en el medio plazo las facultades de Ciencias, Formación del Profesorado y Educación y la Escuela de Ingeniería Informática.
«Estamos ante un avance decisivo para la puesta en marcha de un nuevo campus, que, además, despeja el futuro de la Universidad en los próximos años», celebra el Rector de la Universidad de Oviedo, Ignacio Villaverde, sobre lo que considera «un proyecto de futuro para la universidad y Asturias», pues el traslado de facultades desde Llamaquique al nuevo campus del Cristo dejará espacio para acometer la unificación de sedes judiciales en el céntrico barrio ovetense, muy demandada desde hace años por las autoridades judiciales.
El anteproyecto de los traslados previstos por la institución académica contempla la creación de un gran aulario, aprovechando los casi 20.000 metros cuadrados de espacios disponibles en Maternidad. Del mismo modo, se prevé convertir los 13.000 metros de Silicosis en un edificio con oficinas de departamentos y laboratorios, mientras que la antigua sede de Consultas Externas dispondrá de otros 13.000 metros para acoger las sedes administrativas.
Desde la Universidad, que también acaba de adjudicar un contrato para descontaminar el edificio de la Escuela de Minas para convertirla en la futura sede administrativa central, destacan las bondades de unos traslados que, admiten, «llevarán varios años». Concretamente, subrayan que las tres facultades que se trasladarán desde Llamaquique (Ciencias y Profesorado) y el campus de los Catalanes (Informática) «duplicarán su espacio actual», lo que, a juicio del rectorado, «supondrá un gran beneficio para Asturias y la ciudad de Oviedo».
La resolución de la cesión de los espacios del viejo HUCA a la Universidad recoge que esta última no pagará renta alguna por el uso de los inmuebles, aunque deberá de hacerse cargo de los gastos de acondicionamiento, instalación, conservación, mantenimiento y demás gastos. Asimismo, se recoge que será la propia Universidad la que se encargará de vallar tanto la parcela cedida como la correspondiente a la antigua Residencia Sanitaria Nuestra Señora de Covadonga. Este último es el mayor edificio del antiguo complejo sanitario, también propiedad de la Seguridad Social, para el que a día de hoy no hay planes concretos de futuro, aunque existen estudios desde hace años que recomiendan su demolición.
La resolución que formaliza la cesión fue firmada el pasado día 26 de diciembre por el secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, Borja Suárez Corujo y consolida una operación anunciada el pasado septiembre por la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz.
Inmuebles excluidos
Este acuerdo deja fuera a varios edificios propiedad de la Seguridad Social. Además de la ya mencionada antigua residencia, queda por resolver que pasará en el futuro con el antiguo Centro de Rehabilitación, mientras que la lavandería central, la central de cogeneración energética, el almacén y el centro de salud del Cristo siguen siendo de la Seguridad Social, aunque están transferidos al Principado porque mantienen usos sanitarios o auxiliares.
Suscríbete para seguir leyendo