El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, teniente general Herzi Halevi, aseguró que el ejército logró una “clara victoria” frente a Hezbolá, pero destacó que la “verdadera victoria” se alcanzará cuando el norte de Israel recupere su vitalidad.
Unos 70.000 residentes del norte de Israel permanecen desplazados tras ser evacuados en octubre. Según estimaciones militares, el regreso no será posible hasta finales de febrero. En este contexto, el gobierno aprobó el domingo un paquete de ayuda para continuar financiando la evacuación hasta esa fecha.
Durante una evaluación de la situación en el frente libanés, Halevi expresó que el éxito a largo plazo se reflejará en la prosperidad de la región norte. “La victoria es que habrá ciudadanos, turismo, restaurantes, cafés, ciclismo y agricultura próspera en esta zona”, afirmó, subrayando la necesidad de un fuerte apoyo estatal.
En la reunión participaron altos mandos militares, incluidos el mayor general Ori Gordin, jefe del Comando Norte; el general de brigada Yiftah Norkin, comandante de la 146 División; y el coronel Omri Rosenkrantz, líder de la 300 Brigada Regional “Baram”, responsable de la parte occidental de la frontera con Líbano.
A pesar del alto el fuego firmado con Hezbolá el 27 de noviembre, tropas israelíes continúan desplegadas en el sur del Líbano. Según el acuerdo, Israel debe retirarlas para fines de enero, siendo reemplazadas por el ejército libanés y la fuerza internacional de paz FPNUL, mientras Hezbolá se retira al norte del río Litani, a 30 kilómetros de la frontera.
Ambas partes se acusan mutuamente de violar el alto el fuego. El sábado, un portavoz de Hezbolá sugirió reanudar las hostilidades contra Israel, alegando ataques en el sur del Líbano. Por su parte, Israel niega violaciones al acuerdo, argumentando que sus operaciones se dirigen contra combatientes de Hezbolá que operan al sur de Litani, lo cual consideran una infracción.
la guerra se intensificó tras el 8 de octubre de 2023, cuando Hezbolá comenzó a lanzar cohetes contra Israel. Esto ocurrió un día después de que otro grupo terrorista respaldado por Irán atacara el sur de Israel, dejando 1.200 muertos y 251 rehenes, lo que desató la guerra en Gaza.
Desde septiembre, Israel ha intensificado las operaciones contra Hezbolá, debilitando significativamente su liderazgo en un esfuerzo por facilitar el retorno de los desplazados, estimados en 60.000 antes de los recientes combates.
