Hamás e Israel se culparon mutuamente este miércoles de retrasar un acuerdo de alto el fuego en la Franja de Gaza que incluya la liberación del casi centenar de rehenes que quedan en el enclave palestino, pese a los avances anunciados por ambas partes durante los últimos días.
El grupo terrorista palestino afirmó que Israel había establecido nuevas condiciones, mientras que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, acusó a Hamás de incumplir los acuerdos ya alcanzados.
«La ocupación ha establecido nuevas condiciones relacionadas con la retirada, el alto el fuego, los prisioneros y el regreso de los desplazados, lo que ha retrasado la consecución del acuerdo que estaba en marcha», señaló Hamás.
El grupo terrorista aseguró, sin embargo, que estaba mostrando flexibilidad y que las conversaciones, mediadas por Catar y Egipto, iban en la buena dirección.
Netanyahu respondió inmediatamente con un comunicado: «La organización terrorista Hamás continúa mintiendo, incumpliendo los acuerdos que ya se han alcanzado y sigue poniendo obstáculos en las negociaciones»Sin embargo, Israel continuará incansablemente sus esfuerzos para devolver a todos nuestros secuestrados», sentenció Netanyahu.
El martes, el equipo negociador israelí -que incluye a altos funcionarios del los servicios de inteligencia israelíes (Mosad y Shin Bet) y militares- regresó al país tras una semana de negociaciones para realizar «consultas internas de cara a la continuación de las negociaciones», detalló Netanyahu en otro comunicado.
Por su parte, el Foro de Familias de Rehenes y Desaparecidos, el principal grupo que representa a las familias de las 96 personas que aún siguen secuestradas, urgió este miércoles al Gobierno israelí a firmar un acuerdo, argumentando que «las condiciones para un acuerdo nunca fueron mejores».
«La fuerte declaración del presidente Trump, quien aguarda un acuerdo para el 20 de enero, combinada con el apoyo de la administración (Joe) Biden y los notables logros de Israel sobre el terreno, ha creado una oportunidad sin precedentes. Las amenazas de Hamás han disminuido, Hezbolá y su liderazgo han sido eliminados, y Sinwar ya no está», instó el grupo.
Israel mantiene la presión militar
Mientras tanto, las fuerzas israelíes mantienen la presión militar sobre el enclave palestino. Según fuentes médicas, los ataques militares israelíes mataron al menos a 24 personas en la Franja de Gaza este miércoles.
Uno de los ataques tuvo como objetivo una escuela que alberga a familias desplazadas en el suburbio de Sheikh Radwan, en la ciudad de Gaza, agregaron.
El ejército israelí dijo que su objetivo era un militante de Hamás que operaba en el área de Al-Furqan en la ciudad de Gaza.
Varios palestinos murieron y resultaron heridos en la zona de Al-Mawasi, una zona humanitaria designada por Israel en Jan Yunis, en el sur de la Franja, donde, según el ejército, el ataque tenía como objetivo a otro miembro de Hamás que operaba allí.
El Ministerio de Salud de Gaza, en manos de Hamás, aseguró que las fuerzas israelíes mantienen el asedio a los únicos tres hospitales, apenas operativos en el extremo norte del enclave, que rodean Beit Lahiya, Beit Hanoun y Jabalia.
Las fuerzas israelíes obligaron a los funcionarios del hospital indonesio a evacuar a los pacientes y al personal el martes y siguió operando en las inmediaciones del cercano Hospital Kamal Adwan. También ordenó la evacuación del hospital, pero los funcionarios se negaron a hacerlo, alegando riesgos para decenas de pacientes.
Las Fuerzas de Defensa de Israel estuvieron operando también en las cercanías del hospital durante los últimos dos días y un funcionario de seguridad israelí afirmó que la zona es un bastión de Hamás. «Kamal Adwan está en el centro de los combates más complejos en Jabalia», afirmó. «Estamos siendo muy cautelosos».
Hamás acusa a Israel de intentar despoblar permanentemente el norte de Gaza para crear una zona de amortiguación, algo que Tel Aviv niega.
La guerra se desencadenó por el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 al sur de Israel, en el que 1.200 personas murieron y 251 fueron tomadas como rehenes en Gaza, según recuentos israelíes.
Según las autoridades sanitarias del enclave controlado por Hamás, la campaña de Israel en Gaza ha matado desde entonces a más de 45.200 palestinos. La mayor parte de la población, de 2,3 millones de habitantes, ha sido desplazada y gran parte de Gaza está en ruinas.