Dos presos del centro penitenciario Antoni Asunción, ubicado en Picassent (Valencia), han logrado fugarse esta noche en circunstancias que están siendo investigadas por la Guardia Civil. Se trata de David M. G. y Sergio C. D., de 39 y 43 años respectivamente, conocidos delincuentes especializados en atracos. Al parecer, los internos, que estaban en dos celdas contiguas en un módulo de cumplimiento especial para presos por delitos violentos, se descolgaron con sábanas trenzadas desde una de las ventanas tras forzar los barrotes. Y posteriormente huyeron de las instalaciones penitenciarias eludiendo el doble perímetro de seguridad.
La fuga ha sido detectada en torno a las 23.30 horas cuando una patrulla que hacía la oportuna ronda en el perímetro del centro penitenciario se ha percatado que había un portón ligeramente forzado. Tras dar aviso, los funcionarios han procedido a realizar un recuento de internos por módulos. En el módulo dos de cumplimiento los funcionarios de prisiones han comprobado que faltaban estos dos presos, quienes estaban cumpliendo condena por robos con violencia e intimidación.
La fuga de estos dos presos, ambos de nacionalidad española, se habría producido durante la noche del sábado al domingo. Al parecer, David M. G. y Sergio C. D., esperaron a que se realizara el recuento de la noche y tras ello pusieron en marcha su plan para escaparse. Todo indica que los reos llevaban tiempo planeando dicha fuga. De hecho, para poder escapar han tenido que forzar al menos los barrotes de una ventana, han hecho acopio de sábanas que han utilizado a modo de cuerda atándolas unas a otras, para poder descender hasta la zona del gimnasio, y más tarde han huido por un portón que es utilizado como salida de vehículos, ubicado en la zona posterior de los módulos de cumplimiento.
Se desconoce cómo los protagonistas de esta fuga, que recuerda a otras ocurridas décadas atrás, han podido evitar el doble perímetro de seguridad sin ser captados por las cámaras de videovigilancia o el sistema de alarma.
Se investiga si una vez fuera del complejo penitenciario los delincuentes fugados han huido a pie y después han robado un vehículo en una localidad próxima para poner distancia de por medio. Aunque no se descarta que tuvieran un teléfono móvil oculto en prisión, desde el cual hayan podido llamar para pedir ayuda.
La búsqueda de los fugados
Los dos presos, a los que tratan ahora de localizar las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, son de Paterna y l’Eliana, por lo que se han establecido controles para identificarlos y proceder a su detención y se ha alertado a las policías locales de estos municipios, así como de otros próximos, por si buscaran refugio en casa de algún conocido o familiar.
No se trata de la primera fuga ocurrida en el centro penitenciario valenciano en los últimos años. A principios de julio de 2022 otro preso se fugó con total tranquilidad por la puerta principal, en ese caso sin tener siquiera «un plan de evasión» previsto, aprovechando una concatenación de fallos en materia de seguridad. Como informó en su día Levante-EMV, el reo aprovechó que la puerta del locutorio estaba abierta para salir mezclándose entre la población civil que acude a prisiones a visitar a familiares o los abogados a visitar a sus clientes.
