El juez que investiga a la esposa de Pedro Sánchez, Juan Carlos Peinado, va a investigar si los abogados del llamado caso Begoña comentan con la prensa detalles de la investigación, de cara a imponerles una multa si lo hacen.

Así lo expone el magistrado en una resolución fechada este jueves, en la que explica que, «una vez más», y «como está siendo público y notorio», el día anterior, el 18 de diciembre, tras la declaración como investigada de Gómez, varios abogados ofrecieron unas breves declaraciones ante los periodistas. Es lo que se conoce en el argot periodístico como canutazo, que fue grabado y emitido en directo por varias cadenas de televisión.

«Se comentan y revelan el contenido de las mismas [las declaraciones judiciales] en las inmediaciones de la sede del edificio de los Juzgados de Instrucción de Madrid», se queja el juez.

«El 18 de diciembre de 2024 [día en el que declaró Begoña Gómez como investigada], una vez más, por parte, entre otros (…), de la acusación del partido político Vox, de la asociación Hazte Oír y del letrado de la investigada, casi a modo de rueda de prensa, se ha ofrecido públicamente el contenido de lo acontecido en la sede del Juzgado pocos minutos antes», reprocha.

«Consecuentemente, se acuerda abrir una pieza separada para la posible imposición de la multa contemplada [en el artículo 301 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal] y practicar las actuaciones tendentes a la comprobación de la existencia de las conductas merecedoras, en su caso, de dicha corrección», insiste el juez.

El partido Iustitia Europa, una de las acusaciones populares del caso y cuyo presidente, el letrado Luis María Pardo, ofreció esta declaración ante los medios de comunicación, ya ha avanzado que pedirá amparo ante el Colegio de la Abogacía de Madrid ante este «atropello».

La declaración

El pasado miércoles, Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez, declaró ante el juez Peinado durante poco más de media hora de interrogatorio.

Se trataba de la tercera vez que acudía al Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid. Y, en esta ocasión, sí respondió preguntas. Pero sólo las formuladas por su abogado, el exministro del Interior Antonio Camacho. En total, unas 35 cuestiones, contestadas de forma fluida.

Negó haberse apropiado indebidamente de un programa informático desarrollado para la Universidad Complutense de Madrid (UCM), centro público en la que Gómez co-dirigió dos cátedras, que fueron clausuradas este 2024. «Firmé lo que me dijo la Universidad», declaró ante el juez.

Ese extremo era el asunto por el cual había sido citada a declarar por parte de Peinado, quien la investiga por un total de cuatro delitos: tráfico de influencias, corrupción en los negocios privados, apropiación indebida e intrusismo profesional.

Estos dos últimos, que motivaron su interrogatorio este miércoles, se derivan de la querella que la asociación Hazte Oír presentó en su contra, en la que le acusa de haberse apropiado de dicho software.

Ante el juez, no obstante, Gómez insistió en que registró el dominio de dicho software siguiendo las directrices de la Complutense. De hecho, como adelantó EL ESPAÑOL, Camacho aportó al Juzgado varios correos electrónicos entre su clienta y la UCM que corroboran este extremo.

Este miércoles, al responder a su abogado, Begoña Gómez recalcó varias veces que siguió las instrucciones de la universidad en lo relativo a esa herramienta digital, como consta, por escrito, en dichos e-mails.

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