El primer ministro de Israel revisará avances en las negociaciones mientras Hamás muestra flexibilidad. La CIA lidera esfuerzos en Qatar.
El jefe de la CIA llega a Qatar para facilitar las negociaciones
Una reunión de alto nivel encabezada por el primer ministro Benjamin Netanyahu está programada para el jueves. En esta evaluación, participarán el ministro de Defensa, Israel Katz, y el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer. Según reportes, el propósito es analizar los progresos en las negociaciones de un posible alto el fuego con Hamás.
Simultáneamente, el jefe de la CIA, William Burns, se encuentra en Qatar desde el miércoles por la noche para mediar en asuntos clave relacionados con la guerra. Fuentes informan que altos funcionarios israelíes podrían unirse a estas conversaciones si se logran avances significativos.
En un intento de garantizar confidencialidad, Netanyahu ha reducido el número de personas involucradas en las negociaciones, prohibiendo que compartan detalles sobre las discusiones en curso, de acuerdo con reportes del Canal 12.
Sin embargo, persisten desacuerdos importantes sobre varios puntos, incluyendo el número de rehenes que Hamás debe liberar, el retorno de desplazados al norte de Gaza, la liberación de terroristas palestinos presos y su posible exilio a terceros países.
Detalles clave sobre las negociaciones en curso
- Flexibilidad de Hamás: Según un funcionario israelí, Hamás estaría dispuesto a ceder en ciertos aspectos bajo presión diplomática y militar.
- Posible acuerdo: Israel propone liberar terroristas palestinos presos a cambio de la entrega de rehenes, incluidos cuerpos de personas fallecidas.
- Rol de mediadores: Qatar y Egipto actúan como intermediarios en las negociaciones entre Israel y Hamás.
- Ayuda humanitaria: Israel permitiría mayor ingreso de recursos esenciales durante la primera fase de un posible acuerdo.
Israel y Hamás discuten términos de un acuerdo gradual
En declaraciones a medios, funcionarios israelíes han indicado que las conversaciones se centran en la liberación de 34 rehenes durante la primera etapa del acuerdo. Entre los liberados se incluirían mujeres, niños y personas mayores, según demandas humanitarias de Israel.
Por otro lado, Hamás parece estar dispuesto a aceptar la presencia de tropas israelíes en áreas clave, como los corredores de Filadelfia y Netzarim, durante la primera fase del acuerdo, lo que marca un cambio en su postura inicial.
El medio libanés Al Mayadeen, asociado a Hezbolá, citó a un alto terrorista líder de Hamás que confirmó avances en las negociaciones. Según este, las conversaciones también incluirían acuerdos para reconstruir hospitales y otras instalaciones en Gaza.
No obstante, las tensiones persisten debido a la falta de consenso sobre algunos puntos, lo que podría poner en riesgo la concreción del acuerdo. Según un funcionario, «la pelota está en la cancha de Hamás».
Estados Unidos intensifica la presión para concretar un acuerdo
El asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, declaró el miércoles que se está cerca de lograr un acuerdo, pero que todo depende de la disposición final de Hamás para liberar rehenes.
En una entrevista con MSNBC, Sullivan destacó que Israel está dispuesto a cumplir su parte del acuerdo, pero que Hamás aún debe comprometerse con la primera fase, la cual involucraría la liberación de mujeres, ancianos, heridos y enfermos.
El presidente estadounidense, Joe Biden, también está involucrado en las conversaciones y ha mantenido comunicación reciente con Netanyahu para discutir posibles avances.
Mientras tanto, funcionarios israelíes han expresado escepticismo respecto a la comprensión de los detalles por parte de los enviados del presidente electo Donald Trump, lo que ha aumentado la presión para cerrar un acuerdo antes del cambio de administración en Estados Unidos.
Reacciones divididas dentro del gobierno israelí
Algunos miembros del gobierno israelí se han manifestado en contra del posible acuerdo. Bezalel Smotrich, ministro de Finanzas, calificó las negociaciones como un «grave error» que podría perjudicar los intereses de Israel en la guerra.
Según Smotrich, Hamás está en su punto más bajo desde el inicio de la guerra, y un acuerdo en estos términos podría darle una ventaja estratégica no deseada. Asimismo, afirmó que su partido, Sionismo Religioso, influirá en las decisiones del gobierno para mantener líneas rojas claras.