«Empecé a pinchar vinilos con 15 años en la discoteca madrileña Pachá. Me encantaba la música y en los 80 esa era la única forma de estar lo más cerca de ella», relata a este periódico Eugenio López (50). Es copropietario de Mad Vinyl, la tercera fábrica de elepés de toda España que se encuentra ubicada en Algete (Madrid).
España en el 2023 ha mantenido su liderazgo en el consumo de música a nivel mundial. Con una media de 22,1 horas por semana, por encima de la media global de 20,7 horas, según los Productores de Música de España (Promusicae). Esta cifra, que se traduce en aproximadamente 432 canciones de tres minutos cada semana, refleja un aumento del 5,4% en comparación con 2022 y consolida la tendencia de crecimiento del consumo musical.
Un aspecto que ha cambiado a lo largo de los años es la forma de consumir la música. Ahora se escucha ‘en segundo plano’ mientras se realizan otras actividades. Según comenta Eugenio, en los 80 los vinilos eran caros y entre amigos era común que cada uno se comprara un elepé diferente y se reunieran el fin de semana en casa de alguno de ellos para escuchar todas las adquisiciones. Esas tardes, única y exclusivamente, escuchaban música tumbados en el suelo de una habitación.
López defiende que los discos son historias que merecen ser escuchadas siguiendo el orden que el artista propone, desde la primera hasta la última canción. Detrás de esa selección hay una intención.
Sin embargo, hoy es raro escuchar un álbum entero, el modo aleatorio domina las escuchas. Se debe a que el formato en el que se reproducen las canciones también ha variado con el tiempo.
El auge del streaming ha ido de la mano con la caída de las ventas de formatos físicos, especialmente del CD. Sin embargo, el mercado físico español en 2023 creció por encima del 9%, alcanzando los 62 millones de euros en ventas, con el elepé como gran protagonista.
El mercado de los elepés ha aumentado un 19,4% en 2023 hasta alcanzar los 35 millones de euros en ventas y superar los dos millones de unidades vendidas. Refleja un crecimiento significativo respecto a 2013, cuando tan solo se vendieron 140.000 copias. Actualmente, los vinilos dominan el mercado físico, con una cuota del 56,7%, mientras que los CD han caído hasta el 42%.
3.000 vinilos al día
La idea de negocio se instaló en la mente de López en el 2005, cuando conversaba con un dependiente de una tienda de música. «Ya no quedan fábricas de vinilos en España», fue la frase que le dijo y que no paró de retumbar en su cabeza hasta que consiguió abrir la suya propia. Lo hizo de la mano de otros dos socios: Javier López (52) y Miguel Ángel Martínez (57).
La fábrica Mad Vinyl encendió sus máquinas en 2020, en pleno apogeo de los elepés y en mitad de una pandemia. Sin embargo, el Covid-19 realmente no fue un problema. El verdadero obstáculo lo tuvo Eugenio los años anteriores a la apertura para encontrar maquinaria que estuviera en buen estado. «Muchos me dijeron que lo que pretendía era muy difícil, que no iba a conseguirlo, pero parece que se equivocaron», detalla Eugenio.
Las ventas de los primeros meses fueron «una locura» según explica el fabricante. Había alta demanda y escasez de materiales. Empezaron con una máquina que hacía un único turno de fabricación, pero rápidamente tuvieron que ampliarlo a tres. Con el tiempo se hicieron con dos máquinas más y actualmente producen 3.000 discos al día.
Éstos se fabrican a partir de un material plástico llamado PVC. En primer lugar, se crea el molde que contiene los surcos con el audio grabado, es decir, el lacquer. Y después, el PVC caliente se coloca en una prensa entre dos moldes y se aplica presión para dar forma al disco.
¿Cuánto cuesta? Todo depende del presupuesto y las virguerías que se quiera hacer en el álbum. 100 copias de uno sencillo rondarían los 1.000 euros. Y de ahí al infinito, como dice Eugenio. Colores personalizados, estampados, portadas dobles, librillos extensos y otros extras podrían encarecer hasta llegar a los 30 euros la unidad.
No todo es rock
Artistas como Rafael, Luz Casal, David Bustamante, Robe o Antonio Orozco han gestado sus elepés en esta fábrica madrileña. Discos nuevos y reediciones de álbumes antiguos. Aunque, López confiesa que la mayoría de sus clientes son más jóvenes y que son artistas independientes o pequeñas discográficas.
En el año pasado el 53% de los vinilos vendidos en España fueron de artistas españoles, entre los que destacan Rosalía, C.Tangana y Aitana. Sin embargo, los artistas internacionales tuvieron un papel relevante. La estadounidense Taylor Swift lideró la lista de elepés más vendidos con tres discos (1989, Speak Now y Midnights) en los primeros seis puestos.
En Mad Vinyl en torno al 50% de los pedidos también son encargados desde el extranjero, por cantantes escandinavos, alemanes, franceses, italianos e incluso australianos o japoneses.
A pesar de que en el 2023 el 83% de los elepés más vendidos en España corresponden a discos publicados ese mismo año, las reediciones de clásicos también tienen un peso significativo. Grupos históricos como Héroes del Silencio, Pink Floyd o The Beatles siguen demandándose, lo que indica que el mercado del vinilo no solo se alimenta de novedades, sino también de nostalgia.
Pero ¿quién escucha música en un tocadiscos? «Desde chavales hasta mayores. Melómanos, coleccionistas, fans y cualquiera que valore la grandeza de un vinilo», asegura a este periódico Mario Ballester (31).
Es copropietario junto con Chema Bordas (37), Pere Porcar (32) y Andreu Porcar (35) de Oldies, la tienda valenciana de vinilos más antigua de España. Abrió en 1982 y desde hace tres años la llevan estos cuatro jóvenes.
Son amantes de la música y, por supuesto, relacionados con ella. De hecho, Mario, Chema y Andreu forman parte del grupo Calivvla. Sin embargo, según señala Ballester: «Esto no nos da de comer, pero la tienda sí. Nos regala la posibilidad de tocar todos los palos de la música, desde la creación hasta su venta». El nuevo relevo de Oldies busca que su tienda de elepés sea un entorno de conversación, debate y oferta cultural libre de prejuicios.
Tanto Eugenio, el fabricante, y Mario, el músico, coinciden en que tener un vinilo es como tener una obra de arte en casa que puedes disfrutar sin cansarte.
*Cristina Muñiz, autora del reportaje, es alumna de la segunda promoción 2024-2025 del Máster de Periodismo de EL ESPAÑOL/UCJC.