Bochorno, falta de actitud e impotencia fue lo que mostró el Eldense en su visita a La Rosaleda, tras perder gracias a los goles de Antoñito y Nelson Monte en la primera mitad y Kevin Medina, aunque el VAR llegó a anular hasta tres goles a favor de los blanquiazules y Martos fue expulsado en la primera mitad. Un partido que es la gota que colma el vaso de un Deportivo inofensivo, sin garra y que deambula sin criterio hacia el descenso.
El escenario era inmejorable para dar un golpe sobre la mesa fuera del Nuevo Pepico Amat, ante una Rosaleda y una afición que siempre está a la altura. Uno de esos campos que acrecientan lo que se ha conseguido en los últimos años, compitiendo en escenarios históricos del fútbol español, que no hace mucho estaban disputando Champions. Un recién ascendido que desde el principio dejó claro que ese rol no era para él.
En lo táctico, Ponz dio entrada a David Timor por Bernal en el centro del campo tras cumplir partido de sanción ante el Elche y a Unai Ropero por Juanto en ataque. Dos equipos a los que les está costando marcar en liga esta temporada, de hecho, el Deportivo encadenaba cuatro partidos sin ver puerta y con el ‘debe’ en la faceta goleadora, reconocido por el propio Ponz en la previa.
Una faena que también arrastraba el conjunto malagueño y que pareció solventar a las primeras de cambio, ya que en el minuto 8 un pase largo a Dani Sánchez descuadró el esquema defensivo del Eldense haciendo daño por la banda derecha defendida por Gámez para que Antoñito batiera a Mackay y hacer el 1-0. El equipo de Elda dio un paso al frente y tuvo varios acercamientos, pero sin llegar a concretar.
El cuadro blanquiazul volvió a golpear con el tanto de Einar al cuarto de hora de encuentro, pero el VAR intervino debido a que el balón salió por la línea de fondo en el centro. El Deportivo respiraba e incluso tuvo el empate en una contra en la que Quintana se durmió a la hora del remate. La estocada la dio Nelson Monte a la media hora, nuevamente tras un balón parado botado por Dani Sánchez, que tras una pésima defensa terminó con el balón en el fondo de la portería de Mackay.
2-0 y el Málaga seguía hurgando en la herida, el meta azulgrana desbarató pocos minutos después un mano a mano de Gabilondo. El Eldense era un juguete roto en manos de los malacitanos, que cada vez que llegaban ponían el susto en el cuerpo a su rival. El equipo dirigido por Ponz pedía a gritos el descanso, parando únicamente a su rival mediante faltas y con un papel muy pobre el que estaba desempeñando en el feudo malaguista.
La guinda la puso Iván Martos cuando en apenas tres minutos se auto expulsó con dos amarillas cada cual más absurda que la anterior. Incluso dio tiempo a revisar otra expulsión sobre Fran Gámez al derribar a su rival cuando ya encaraba la meta de Mackay, para su suerte, el futbolista del Málaga estaba en fuera de juego. Triste imagen de un Eldense al que en los últimos partidos le estaba fallando la puntería de cara a gol, pero es que en defensa estaba presentando una versión todavía peor, y la peor noticia es que todavía quedaban 45 minutos.
El entrenador valenciano intentó buscar soluciones dando entrada a Jorquera por Chapela en el extremo y Grigore por Marc Mateu en el lateral izquierdo. Pero las sensaciones no cambiaban, menos aún cuando el conjunto blanquiazul anotó el tercero obra de Lobete fruto nuevamente de un balón parado. Pero nuevamente el VAR entró en escena para anularlo, en esta ocasión por fuera de juego. Previamente a esa acción el Málaga estrelló un balón al palo y Baturina mandó inexplicablemente el balón fuera en su remate sin marca en defensa.
Nuevamente el VAR intervino unos minutos después de anular, precisamente para la misma tarea, para anular por tercera ocasión un gol local, en esta ocasión por fuera de juego. La imagen del equipo no se levantaba, mermados por la inferioridad numérica y por la actitud de muchos jugadores, sobrepasados por el partido y con una actuación impropia de un equipo que se está jugando la salvación.
Los jugadores eran una sombra de lo que llegaron a ser en la primera vuelta, sin creer en los hombres de ataque y dejando espacios atrás que el Málaga estaba aprovechando para hacer daño. Resultado corto viendo lo que estaba ofreciendo cada equipo, con una Rosaleda entregada a su equipo y que no dudó en cachondearse de la entrada de Alan Godoy al terreno de juego. El delantero fue uno de los protagonistas en el ascenso la temporada pasada a Segunda, siendo el autor de uno de los goles del Nástic que terminó con el gol malaguista en el último minuto.
El tramo final fue un trámite, con el Málaga que levantó el pie del cuello del Eldense después del tercer gol anulado y donde todo el espectáculo lo pusieron los más de 21.000 aficionados, entregados a su equipo con numerosos cánticos y villancicos. Pese a ello, Kevin Medina se inventó un golazo de falta para poner el definitivo 3-0. Felicidad en la costa del Sol y carbón para un Eldense que no estuvo en ningún momento sobre el verde y que solamente sirve para echar más leña al próximo y último partido de la primera vuelta en casa del Racing de Santander el próximo domingo (18:30 horas).
Ficha del partido
Málaga C.F. (3): Alfonso Herrero; Gabilondo, Nelson Monte, Einar, Dani Sánchez; Larrubia (Kevin Medina 79’), Luismi, Manu Molina (Ramón 87’), Antoñito (Rahmani 79’); Baturina (Dioni 66’), Lobete (Aarón 66’).
C.D. Eldense (0): Ian Mackay; Fran Gámez, Martos, Íñigo Piña (Camarasa 85’), Marc Mateu (Grigore 46’); Víctor García, Sergio Ortuño, David Timor, Chapela (Jorquera 46’), Quintana (Godoy 80’), Ropero (Bernal 72’).
Goles: 1-0 (Antoñito 8’), 2-0 (Nelson Monte 28’), 3-0 (Kevin Medina 93’)
Árbitro: Sánchez López (Comité murciano). Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Gabilondo y Lobete. Por parte de los visitantes Jorquera, Unai Ropero, Grigore, Camarasa, David Timor y expulsó a Iván Martos.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 20 de Segunda División disputado en el Estadio La Rosaleda ante 21.023 espectadores.