Gracias a las imágenes obtenidas por el telescopio Webb, los astrónomos han identificado rocas espaciales en el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter que no se habían detectado previamente: con tamaños que van desde un autobús hasta un estadio de fútbol, serán monitoreadas para confirmar o desestimar un posible curso de colisión contra la Tierra.
Científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en Estados Unidos, han publicado un estudio en la revista Nature en el cual informan el hallazgo de los asteroides más pequeños jamás detectados en el cinturón principal entre Marte y Júpiter, a partir de las nuevas tecnologías de observación empleadas por el Telescopio Espacial James Webb (JWST) de la NASA.
Se trata de 138 rocas espaciales con múltiples tamaños, que oscilan entre un autobús y un campo de fútbol. Hasta el momento, los asteroides más pequeños que los científicos podían discernir con las posibilidades tecnológicas previas en esa región del Sistema Solar tenían aproximadamente un kilómetro de diámetro.
Otro enfoque y avances tecnológicos
A partir del nuevo enfoque basado en el poder del telescopio Webb, los astrónomos pueden detectar asteroides en el cinturón principal de hasta solamente 10 metros de ancho. Aunque los más pequeños no insumen grandes riesgos, los de mayor tamaño podrían ser dañinos en caso de colisionar contra nuestro planeta.
“Hemos podido detectar objetos cercanos a la Tierra de hasta 10 metros de tamaño cuando están realmente cerca de nuestro planeta. Ahora tenemos una forma de detectar estos pequeños asteroides cuando están mucho más lejos, por lo que podemos hacer un seguimiento orbital más preciso, que es clave para la defensa planetaria”, explicó en una nota de prensa el científico Artem Burdanov, autor principal del estudio.
En principio, la técnica se basó en una forma de visualizar de manera diferente imágenes que previamente se habían tomado con otro objetivo, en este caso caracterizar sistemas de exoplanetas, analizándolas con nuevas herramientas de procesamiento que incrementan la velocidad y la cantidad de datos trabajados.
Los hallazgos se multiplicarán
Aplicando esa metodología y recursos informáticos, junto con el enorme potencial del JWST para explorar el cosmos en el espectro de luz infrarroja, los astrónomos comenzaron a identificar asteroides nunca antes apreciados en el cinturón entre Marte y Júpiter: es probable que algunos de ellos terminen convirtiéndose en objetos cercanos a la Tierra y se acerquen hasta nuestro planeta.
En tanto, las próximas observaciones del telescopio Webb se centrarán en 15 a 20 estrellas lejanas durante al menos 500 horas, un esfuerzo que podría conducir al descubrimiento de miles de nuevos asteroides en nuestro Sistema Solar, según informa Live Science. Además, los telescopios de nueva generación, como el Observatorio Vera C. Rubin, también ayudarán a descubrir miles de pequeños asteroides: se espera que su alta frecuencia y resolución permitan detectar hasta 2.4 millones de rocas espaciales, casi el doble del catálogo actual, dentro de sus primeros seis meses de funcionamiento.
Referencia
JWST sighting of decameter main-belt asteroids and view on meteorite sources. Artem Y. Burdanov et al. Nature (2024). DOI:https://doi.org/10.1038/s41586-024-08480-z