Los precios récord del mercado de la electricidad durante lo peor de la crisis energética provocaron una huida masiva de clientes de la tarifa regulada de luz. Los hogares que tenían contratado el denominado precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC) fueron los que sufrieron más directamente los estragos de la volatilidad y la escalada histórica de los precios, generando una estampida de clientes hacia las tarifas del mercado libre (que tradicionalmente habían sido más caras que la regulada, pero que entonces aportaban una deseada estabilidad con precios fijos)

Fuente