Lamine Yamal estará entre 3 y 4 semanas de baja por una lesión de grado 1 del ligamento intertibio-peroneo anterior, como ha comunicado recientemente el equipo médico del Barcelona. Todo ello después de sufrir un choque con un rival ayer, 15 de diciembre, en el partido que los culés disputaron con el Leganés. Con esta, son dos lesiones de tobillo las que ha sufrido el extremo en solo dos meses: ¿Debe preocupar esto al aficionado? ¿Cómo va a afectar a su juego cuando vuelva? ¿Cuánto tardará en estar al 100%?
Todo ello lo ha resuelto a ‘Guías de Salud’ un experto como lo es el doctor Sergio Hortelano, especialista en traumatología en Clínica Cemtro.
Una lesión diferente al «típico» esguince de tobillo
Los ligamentos intertibio-peroneo anterior son los que unen a la tibia y el peroné, y así explica el especialista la lesión de Lamine y la razón por la que es más grave que el típico esguince:
- «A diferencia del esguince más recurrente, que se produce en el ligamento peroneo astragalino y que se lesiona «en inversión», es decir, con el tobillo hacia dentro, la que ha sufrido Lamine Yamal también se produce con el tobillo hacia dentro, pero en su caso la punta de la bota mira hacia fuera«, explica el doctor.
En el fútbol estas lesiones tienen mucha influencia porque los tacos se quedan clavados en el césped y da lugar a estos giros
A esta lesión también se le llama esguince alto del tobillo porque se encuentra «en una parte más superior y externa que la típica torsión«. Además, al ser de grado 1 se trata de un desgarro parcial del ligamento por lo que el doctor considera que los tiempos serán tal y como los han marcado desde el club catalán, entre 3 y 4 semanas.
En cuanto al dolor que se sufre, «es en la parte alta de la región del tobillo, se nota sobre todo cuando comprimimos la tibia y el peroné y es un dolor intenso. Se siente un pinchazo y una gran dificultad para lograr todo el rango articular«, afirma Hortelano.
El proceso de recuperación
En cuanto a plazos, suele ser el doble que el esguince estándar, y por ello serán entre 3 y 4 semanas.
- «En primer lugar, lo normal es que se le ponga una bota ortopédica Walker para inmovilizar la zona y se trabaja desde el principio con fisioterapeutas con frío para tratar los niveles de drenaje, hematomas…
- Posteriormente se sigue con ejercicios de movilidad para ir ganando rango articular.
- Se continua con ejercicios de fuerza y estabilidad.
- Cuando el jugador deja de tener dolor, ya puede empezar a tocar balón.
Para estar al 100% de nuevo, diría que tienen que pasar entre 3 y 5 semanas, pero también depende de cómo se encuentre el propio jugador«, concluye en cuanto a los plazos el doctor de esta prestigiosa clínica.
Además, en este caso se trata de un futbolista muy joven (17 años), lo que ayuda al proceso por tener «mayor elasticidad y capacidad de recuperación».
Dos lesiones de tobillo en dos meses: ¿Preocupante?
Este futbolista ya sufrió en el pasado mes de noviembre una sindemosis (articulación fibrosa que une huesos separados por una amplia distancia con una lámina de tejido fibroso) que le mantuvo tres semanas fuera del césped.
El doctor es tajante y afirma que no es para nada preocupante porque es una lesión con escasa tendencia a la recaída. Lo que sí advierte es que se trata de una lesión que refleja «la carga de partidos, así como el cansancio y fatiga porque ello influye y mucho y puede ser la causa».
Es «en los momentos de choque«, como en este caso, el lance del juego en el que más probabilidades hay de sufrir esta lesión, «cuando el cuerpo y el pie están apoyados con la punta de la bota hacia fuera y un jugador choca contigo produciendo este giro del tobillo».
En cualquier caso, la conclusión de nuestro traumatólogo es optimista. Y aunque advierte que es probable que en su vuelta Lamine Yamal juegue con un vendaje funcional que «limita bastante el tobillo a la hora de hacer regates», el aficionado culé puede estar tranquilo… al menos de momento.