Noche tras noche cientos de miles de personas se sientan frente al televisor para disfrutar de uno de los programas más anecdóticos de la parrilla: First Dates. El formato de Cuatro reúne a sus invitados, que buscan el amor en una romántica velada, que bien puede ir sobre ruedas, pero que también en muchas ocasiones acaba siendo un verdadero desastre.
Los espectadores de First Dates están acostumbrados a conocer a través del programa a personajes de lo más pintorescos. A menudo los carácteres de quienes se sientan en la misma mesa para disfrutar de la cita a son demasiado incompatibles. Por otra parte, otra situación que suele darse es que la tensión sexual entre ambos se palpa incluso a través de la pantalla. Sea como sea, siempre se acaban generando situaciones de lo más surrealistas en el plató ‘del amor’.
Miriam y Abraham también han acudido a First Dates en busca de su media naranja. Ella es una valenciana, de Paterna, de 31 años. Es educadora matrimonial y su objetivo es encontrar una persona con la que casarse, formar una familia y construir un futuro. Tiene diez hermanos, y para ella la familia está por encima de todo. Es católica, y le encantaría encontrar a alguien con quien vivir algo como lo que tienen sus padres: «Han pasado muchas batallas con nosotros: enfermedades, problemas económicos… y siempre han sido un equipo».
Miriam y Abraham en First Dates. / Cuatro
Por su parte, Abraham, es madrileño. Es conductor de trenes, y busca a una mujer de derechas que comparta sus ideales de familia y religión. Al hablar un poco con su cita se ha quedado alucinado: «Es perfecta, no le he visto ninguna imperfección, ha sido un flechazo», aseguraba. A ella también le ha gustado mucho: «Me ha gustado mucho cómo iba vestido y cómo ha conjuntado la camisa con las deportivas, físicamente está muy bien».
También han hablado de sus ideales políticos, y Miriam ha sido quien ha abierto el melón. «A mí hay un partido que me encanta, que es Vox. Mis amigas me dicen que es súper machista, pero yo no lo veo así. Hay que ser bueno, pero no tonto, y España está siendo muy tonta». A él no podía gustarle más lo que escuchaba: «Me está encantando tu postura, la comparto totalmente».
«Es importante que Abraham vote a Vox porque creo que tu pareja tiene que compartir tus creencias políticas. Al final, el partido político al que votas demuestra la manera de vivir de cada persona», decía la valenciana cuando se quedaba sola ante las cámaras.
Después de esto, llegaba el momento de la decisión final. A ambos les ha encantado la cita, y no han dudado en que querían repetir y volver a verse. Él ha dicho que le «ha parecido una chica diez: formal, seria y muy responsable». Ella, por su parte, opina que es «un tío centrado y tenemos valores en común».
