- Estados Unidos, principal destino internacional del turrón
- Francia y Portugal lideran las exportaciones a Europa
- Recuperación en el mercado nacional
- Se mantiene la tradición
- Impacto de los costes en la producción
- Perspectivas para 2024
El turrón está conquistando paladares más allá de nuestras fronteras. Las exportaciones han aumentado un 5% este año y Estados Unidos y México se han posicionado como los mercados en los que más triunfa este dulce navideño, seguidos de Francia y Portugal. El consumo nacional también despega estas navidades con unas expectativas de incremento de ventas del 3%, después de un 2023 «flojo» por la inflación.
Estados Unidos, principal destino internacional del turrón
«El sur de Estados Unidos y México están compensando la caída de la demanda en países con crisis económicas como Venezuela, Cuba y Argentina«, explica a Confidencial Digital Federico Moncunill, secretario general del Consejo Regulador de las Indicaciones Geográficas Protegidas Jijona y Turrón de Alicante, que agrupa a 28 empresas del sector.
La fuerte presencia de población hispana en el sur de Estados Unidos ha impulsado las ventas, consolidando a esta región como uno de los principales destinos internacionales del turrón. Las exportaciones de este producto al país norteamericano representan el 20% del total.
Francia y Portugal lideran las exportaciones a Europa
Europa absorbe el 70% de las exportaciones de turrón español. Los mercados más cercanos, Francia y Portugal, siguen siendo los principales compradores. Otros países fuera de Europa, como por ejemplo Marruecos, se están convirtiendo en consumidores emergentes.
Estas regiones valoran especialmente los turrones tradicionales, elaborados con almendra, miel y azúcar, siguiendo recetas centenarias.
Las exportaciones representan el 13% de la producción total de turrón, un sector que mantiene una marcada vocación internacional. Sin embargo, según Moncunill, la mayor parte de la producción se destina al mercado nacional, donde también se percibe una tendencia positiva tras la moderación de la inflación este año.
Recuperación en el mercado nacional
En 2023, la alta inflación redujo el consumo de turrón en algunos hogares españoles. Este año, con una economía más estabilizada, las ventas se han recuperado. «Esperamos cerrar el año con un crecimiento cercano al 3% en el mercado nacional», señala Moncunill.
Aunque los datos no están desglosados por comunidades autónomas, se sabe que Madrid y Cataluña son mercados clave, en línea con su peso económico.
Se mantiene la tradición
El turrón tradicional, como el de Jijona y el de Alicante, se elabora principalmente con almendra de variedades como la comuna y la marcona, seleccionadas por su calidad. Estas variedades mantienen la esencia de este dulce histórico, cuyo origen se remonta a 500 años atrás.
Aunque en el mercado existen sabores más exóticos –este año han lanzado al mercado un turrón de cerveza– Moncunill aclara que estos productos no forman parte de las categorías tradicionales amparados por el Consejo Regulador.
«Los pralinés o turrones de sabores exóticos no tienen nada que ver con nuestras recetas tradicionales basadas en productos propios de la dieta mediterránea«, destaca.
Impacto de los costes en la producción
La subida del precio del cacao, que ha triplicado su valor en el último año, ha afectado al coste de los turrones con chocolate, aunque esta categoría representa una parte menor de la producción.
«Nuestro foco está en los turrones tradicionales a base de almendra, pero las empresas han tenido que ajustar precios debido al aumento de los costes», afirma Moncunill.
Cada fabricante gestiona su política de precios, pero el incremento en las materias primas, como el cacao, inevitablemente se ha trasladado al consumidor. A pesar de ello, la alta calidad de los ingredientes asegura que el turrón siga siendo un producto de referencia en Navidad.
Perspectivas para 2024
El éxito del turrón español en mercados internacionales y la recuperación en el ámbito nacional auguran un cierre de campaña positivo. Este dulce típico no solo sigue siendo un símbolo de la Navidad en España, sino que también refuerza su presencia en mercados donde la población hispana mantiene vivas las tradiciones de sus países de origen.
Con un crecimiento sólido en mercados estratégicos y una estabilización económica, el turrón se perfila como un protagonista indiscutible de las celebraciones navideñas, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.