La posibilidad del podio estaba. Pero la exhibición de Carles Coll en la final de los 200 braza del Mundial de piscina corta de Budapest ya es historia. Con una carrera espectacular, con una exhibición prodigiosa, el nadador tarraconense del Club Natació Sabadell se ha proclamado campeón del mundo en una carrera la historia.
Con 2:01.55, Coll ha superado a Kirill Prigoda (2:01.88) y a Yamato Fukasawa (2:02.01). Ha sido en una prueba en la que ha arriesgado, en la que ha salido valiente y en la que ha acabado a lo grande. Así lo certifica su registro, que le coloca no solo como el mejor del mundo sino también como uno de los mejores nadadores de la historia de su disciplina.
Su 2:01.55 le coloca como el octavo hombre más rápido de siempre en piscina de veinticinco metros, todo tras un duelo en el que ha derrotado al gran favorito y plusmarquista mundial Kirill Prigoda. El ruso no ha podido dar caza a un Carles que ha medido a la perfección los pases para entrar en el Olimpo.
Ha arrancado bien, a rebufo de Prigoda, tercero en el veinticinco y con la seguridad de que era el ruso el hombre al que tenía que seguir. Por ello, cuando su rival ha empezado a tirar, en ritmo de récord del mundo, Carles ha dado un paso más, se ha colocado segundo y se ha pegado a él especialmente tras la tercera piscina.
Ya iba desbocado. Coll ha dado el siguiente paso en el cien, en el que ya se ha puesto primero a pesar de que todavía quedaba la mitad de la carrera. Sin miedo a que le flaquearan las piernas en la parte final, ha sido valiente y ha empezado a abrir hueco a falta de cincuenta metros.
Pero no hay gloria sin sufrimiento. Carles no ha cuadrado el viraje del 150 y ello ha dado fuerza a sus rivales. El ruso Zhigalov, de hecho, le ha dado caza a falta de cincuenta metros y le ha obligado a remar de nuevo. Pero Coll no ha tenido problema: ha apretado de nuevo en el camino al 175, se ha sacado un último volteo prodigioso y se ha lanzado a por un toque de pared que ya es historia de la natación española.
Para el recuerdo queda también su tiempo: su 2:01.55 no solamente es marca personal tras destrozar su 2:03.63 matinal. No solo es récord de España (y ya van doce este invierno) tras pulverizar los 2:02.67 míticos de Melquiades Álvarez en 2009. Es también un registro que queda para la estadística histórica: tan solo Prigoda (2:00.16), Daiya Seto (2:00.35), Marco Koch (2:00.44), Daniel Gyurta (2:00.48), Qin Haiyang (2:01.15), Arno Kamminga (2:01.43) y Michael Jamieson (2:01.43) han sido más rápidos que él a lo largo de la historia.
A sus veintitrés años, en el año de su explosión definitiva, el nadador formado en el Club Natació Tàrraco, que entrena en Virginia Tech con Sergi López, toca el cielo universal. Coll devuelve a España al podio de un Mundial de piscina corta diez años después de que se bajara de él por última vez Mireia Belmonte. Se convierte en el cuarto español en ser campeón del mundo de piscina corta tras los siete títulos de Mireia y las victorias de Erika Villaecija y de Melani Costa, con un oro cada una. Y a descansar: a las 18:59 espera una nueva final en los 100 estilos.