El juez Leopoldo Puente ha decidido no dejar pasar a la comparecencia de José Luis Ábalos en el Tribunal Supremo a todas las acusaciones populares tras agruparlas bajo la dirección letrada del PP. Por ello, han decidido recurrir, hasta la Justicia europea si es necesario, por su derecho a estar presentes durante las declaraciones.
Las distintas acusaciones populares son: el Partido Popular, Vox, el sindicato de Manos Limpias, la Asociación Liberum, Hazte Oír, Asociación de Abogados Demócratas por Europa y el partido político Iustitia Europea.
Denuncian que es “el principio del fin de las acusaciones populares” y que la decisión que ha tomado el juez “es lo que pretende el Gobierno, que se limite el acceso de las acusaciones populares en estos procedimientos”.
Todo esto ha sucedido en el marco de la declaración voluntaria de Ábalos en Tribunal Supremo, la cual estaba prevista que comenzara a las 10:00 horas de la mañana pero finalmente ha empezado veinticinco minutos más tarde.
El retraso se ha producido porque las acusaciones, a las que no se les ha dejado estar presente en la comparecencia del exministro, han intercambiado unas palabras con el magistrado de la Sala con la finalidad de poder quedarse aunque no interviniesen, pero el juez les ha negado esta posibilidad.