Dos años después de su nombramiento, y de forma natural, Luca de Meo abandonará la presidencia de la asociación europea de fabricantes de automóviles (ACEA por sus siglas en inglés). No se trata de una dimisión ni nada por el estilo, sino que obedece a la rotación que se establece en el organismo. De Meo dejará el cargo el 1 de enero tras pasarse los dos últimos años tratando de estabilizar y cohesionar a los constructores ante el reto de la descarbonización y la llegada de nuevos actores (China) al escenario europeo. Su puesto al frente de la patronal lo ocupará el presidente del consejo de administración de Mercedes-Benz, Ola Källenius.
La elección del ‘jefe’ de Mercedes ha sido refrendada por todos los catorce presidentes de las marcas integradas en ACEA (fundada en 1991). Luca de Meo ha dejado el listón muy alto tras enfrentarse repetidas veces a los estamentos políticos, a los que siempre ha acusado de no apostar por la industrialización y una transición ordenada (y multitecnológica) en su cruzada anti-contaminación. Pese a ello, sigue creyendo en el sector. Tras la votación de su sucesor, Luca de Meo ha señalado que «ahora es el momento de colaborar más que nunca en Europa».
Esta misma semana, tras la dimisión de Carlos Tavares, Stellantis solicitó su reingreso en la asociación, algo que De Meo ha valorado muy positivamente: «Acoger de nuevo a Stellantis en ACEA ya es una señal de que la industria es más fuerte cuando actúa con una voz común«. El presidente saliente ha subrayado que «los fabricantes europeos de automóviles se enfrentan a una crisis de competitividad sin precedentes, al tiempo que gestionan una transición hacia la descarbonización que plantea grandes retos: en este momento crítico, la unidad de nuestro sector es primordial». Y sobre su sucesor ha admitido que: «Ola Källenius comparte esta convicción. Puede contar con todo mi apoyo en su toma de posesión como nuevo presidente de la ACEA. Por mi parte, sigo plenamente dedicado a hacer que la industria europea avance».
Posicionarse ante Bruselas
Por su parte, el máximo responsable de Mercedes-Benz, ha aceptado con gusto el reto que supone reemplazar a De Meo al frente de la patronal del sector. «ACEA es una de las voces más relevantes y fiables del sector en Bruselas. Es un honor tomar el relevo de Luca de Meo como presidente de ACEA en un momento tan crítico para la industria europea del automóvil. Gracias a los miembros de ACEA por depositar su confianza en mí, y a todo el equipo de ACEA, que está reforzando incansablemente la posición de nuestra industria ante las instituciones políticas de Bruselas», ha admitido.
Entre los grandes retos de Källenius estará la negociación con la Unión Europea en temas tan candentes como los aranceles a los vehículos eléctricos de China, o la descarbonización prevista para 2035 (pasando por la normativa del CAFE del próximo año. «Durante mi presidencia, ACEA se centrará en mejorar las condiciones regulatorias con el objetivo de afinar nuestra ventaja competitiva en la era digital y eléctrica. Trabajaremos para fomentar una descarbonización de nuestra industria impulsada por el mercado. Y defenderemos un comercio internacional libre, justo y basado en normas. Estoy seguro de que la industria automovilística de la UE tiene lo que hace falta para seguir teniendo éxito en la competencia mundial», ha señalado.
