La gigafactoría de baterías proyectada en Figueruelas (Zaragoza) gracias a la alianza de Stellantis y la compañía china CATL, lider mundial de este mercado, tendrá capacidad para alimentar hasta un millón de vehículos eléctricos cada año con los 50 gigavatios hora (GWh) que tendrá la planta. Esto supondrá una reducción de más de 30 millones de toneladas de emisiones de CO2 durante la vida útil del coche y un ahorro de más de 125 millones de barriles (17 millones de toneladas) de petróleo.
Los nuevos datos sobre la magnitud del proyecto industrial han sido revelados este miércoles por Contemporary Amperex Technology Co. Limited, conocida por sus siglas CATL, en un comunicado de prensa remitido a este diario.
La compañía destaca que el acuerdo con el grupo automovilístico supone su primera empresa conjunta (joint venture) y la tercera planta de fabricación de baterías que impulsa en Europa, tras las desarrolladas en Alemania y Hungría, lo que marca, destaca, «un hito importante en el compromiso de la empresa» con el mercado de este continente.
La primera fábrica neutra en carbono
El proyecto, según la empresa, encarna el enfoque de CATL de «fabricar en Europa, contratar en Europa y servir a Europa”. Desde la multinacional asiática recuerdan la iniciativa, ubicada en Zaragoza, se promueve a través de una empresa conjunta participada al 50% con Stellantis.
Con una inversión total de hasta 4.100 millones de euros, la futura planta producirá baterías avanzadas de fosfato de hierro y litio, incluidas tanto celdas como módulos. En sentido, el comunicado remarca del esfuerzo de Stellantis y CATL por establecer la fábrica como la primera fábrica de baterías de litio neutra en carbono de Europa, lo que refleja «la ambición de ambas empresas de fomentar un futuro más ecológico».
CATL también precisa el número de empleos directos que creará el proyecto, algo que los inversores no había comunicado oficialmente hasta ahora, aunque se estimaba que sería en torno a 3.000. La empresa china eleva esta cifra y asegura que la empresa conjunta creará más de 4.000 puestos de trabajo locales una vez se complete la inversión, «con oportunidades de empleo adicionales» generadas en actividades relacionadas con la cadena de suministro.
Como parte de su estrategia «Serving Europe» (al servicio de Europa), el grupo chino asegura que el objetivo principal de cada proyecto que promueve en este continente «es apoyar a los fabricantes de automóviles europeos en la producción de vehículos eléctricos de alta calidad a precios asequibles».
Desde CATL recuerdan, por último, que la cooperación con Stellantis comenzó en 2016, cuando era simplemente un proveedor. «Hoy esta relación evolucionó para abrir un nuevo capítulo, con la esperanza de producir resultados fructíferos para el éxito mutuo», concluye el comunicado.