Hace tres años y medio, Yoti Carrasco y su socio, Javier Vadillo, abrieron en el barrio de Delicias de Madrid, a escasos metros de la estación de Atocha, el primer hotel de cápsulas de la ciudad, Oxygen Hostel. «Vimos que en Japón funcionaba, y que había similitudes con Madrid; una ciudad superhabitada donde no había espacio para más hoteles en el centro», cuenta Carrasco. Tres años y medio después, la ciudad está viviendo un ‘boom’ de este tipo de alojamientos, que funcionan como hostales de primera. Hay un total de seis repartidos por la capital, principalmente en el centro -no todos puramente cápsulas sino basados en el concepto de módulos individuales-, y que se han convertido en una opción práctica y económica para el turista. 

Fuente