Un río constante de personas, como si fuera aquel que en forma de agua se llevó trágicamente 128.000 vehículos hace poco más de un mes, paseando de un pabellón a otro en busca de un coche que satisfaga sus necesidades y, especialmente, sus urgencias. Esa es la imagen que -incluso media hora antes de que abriera sus puertas- ha dejado el arranque de la Feria del Automóvil de Valencia 2024, una edición celebrada en los pabellones del nivel 3 de Feria Valencia y marcada ineludiblemente por la dana en la que desde el primer minuto las compras -al igual que las expectativas- se han puesto en marcha. Da igual que el objetivo fuera ese turismo más de batalla con un precio asequible o una opción nueva con la cual aguantar años y años, mires donde mires la presencia de ciudadanos al acecho ha sido la tónica.
Buenas expectativas
Lo confirmaba, en los primeros minutos de una feria que ha comenzado a las 11 horas y que se extenderá hasta las 18 horas del domingo, el presidente del certamen, Sergio Torregrosa. «El año pasado fueron 30.000 visitantes, pero este año la verdad es que no sabemos hacia donde vamos. Hay muchísima gente en la entrada y llevamos dos semanas recibiendo muchísimas llamadas«, explicaba antes de aventurar que la feria «entendemos que va a ser un éxito» porque «hay que dar movilidad a todos los afectados».
Entre los primeros de esos damnificados que se agolpaban a las puertas estaba Vicente Cases que, junto a su homónimo padre, tenía clara su misión. «Somos dos afectados, padre e hijo, que vivimos en la misma casa en Catarroja y teníamos los dos coches. Uno estaba en el garaje y ha quedado inundado y el otro no lo encontramos porque estaba en la calle», destacaba antes de apuntar que venían a la cita «por si tuviéramos algún tipo de descuento un poco más fuerte«. «Queremos uno nuevo pero si nos vendieran uno usado a buen precio no habría problema», añadía. Poco más de una hora después, mientras pasea entre vehículos de ocasión, confirmaba que había conseguido su objetivo: un Dacia Sandero -curiosamente el coche más vendido en lo que va de año en España- a estrenar que «con las ayudas del Gobierno me ha salido más barato que uno usado».
Ventas de todo tipo
No era la única venta que se anotaba. Ya fuera en nuevos o usados, los tratos cerrados con ese estrechón de manos se sucedían como si de un zoco se tratara. Lo explicaba José Vicente Chaparro, director de ventas de la concesión Autiber -concesionario oficial de la marca Hyundai- en Valencia, que señalaba que solo una hora después de abrir «hemos tenido que reforzar los equipos comerciales» al no dar abasto. Sus ventas, cuando el reloj apenas tocaba las doce y media, ya estaban en marcha, pero cree que en los días que quedan «seguro que vamos a duplicar nuestras ventas» de años previos. No en vano, aseguraba que hay dos tipos de cliente, el que por la urgencia «tiene una necesidad muy rápida y se acopla a lo que hay en stock» y el que si que es «un poco más selectivo a la hora de buscar algún tipo de etiqueta, ECO por ejemplo».
En otro pabellón, en el que también se aglutinan las gentes por los pasillos, en las mesas o directamente hablando con los comerciales subidos a vehículos con descuentos de 1.000, 2.000 o 5.000 euros de todo tipo, un comercial de KIA con coches ocasión tiene claro que lo que busca sobre todo la gente «es precio, va buscando algo más económico». «Alrededor de los 20.000 euros es lo que la gente se está llevando», explica sobre una jornada en la que «ya hemos generado ventas», aunque cree que «mañana va a ser el día fuerte, porque es festivo».