El excomisario europeo de Justicia, Didier Reynders, se encuentra en el centro de una investigación judicial por presunto blanqueo de capitales a través de la compra de billetes de lotería. Este martes, la Policía belga registró dos viviendas del político liberal y lo interrogó en relación con las transacciones sospechosas que han generado alarma en las autoridades belgas. A pesar de ser interrogado, Reynders no fue detenido y se encuentra en libertad tras su declaración.
La investigación, que abarca varios años, fue iniciada en 2023 tras una denuncia presentada por la Unidad de Procesamiento de Información Financiera (Ctif) y la Lotería Nacional de Bélgica. Según medios locales como Le Soir y la plataforma de investigación Follow The Money, se detectaron transacciones sospechosas relacionadas con la compra de billetes de lotería electrónica por un monto considerable, lo que activó las alertas. Las pesquisas se centran en el periodo que va desde los años en que Reynders fue ministro de Asuntos Exteriores (2011-2019) hasta su etapa como comisario europeo de Justicia, que terminó el 30 de noviembre de 2023.
El registro de las dos propiedades del exministro belga, una ubicada en Uccle, en Bruselas, y otra en Vissoul, en el campo, se llevó a cabo por la mañana, mientras que el interrogatorio a Reynders se desarrolló por la tarde. Aunque la investigación está en curso, las autoridades no han informado si se encontraron pruebas sustanciales durante los registros, como dinero en efectivo. La investigación preliminar sugiere que parte de la compra de los billetes de lotería se realizó en efectivo, y que las ganancias obtenidas se ingresaron en la cuenta digital de Reynders en la Lotería Nacional, desde donde posteriormente fueron transferidas a su cuenta corriente.
Pese a la gravedad de las acusaciones, el excomisario europeo cuenta con inmunidad debido a su cargo en el momento en que se llevaron a cabo los hechos investigados. Esto significa que, aunque se ha abierto la investigación y se han realizado los registros, no se le puede privar de libertad en esta fase inicial. Si la fiscalía decidiera proceder con un juicio, tendría que solicitar a la Cámara de Representantes de Bélgica el levantamiento de su inmunidad para continuar con las acciones legales.
La investigación judicial contra Reynders se considera altamente sensible, y el expediente está bajo embargo, lo que ha restringido su acceso a un círculo reducido de investigadores y magistrados. La fiscalía de Bruselas, dirigida por Frédéric Van Leeuw desde la primavera pasada, ha confirmado la existencia del caso, pero ha rehusado hacer comentarios adicionales.
El político, quien fue una figura clave del partido liberal MR y ocupó importantes cargos en el gobierno belga durante dos décadas, atraviesa un momento complejo en su carrera. Tras fracasar en su intento de asumir la presidencia del Consejo de Europa, Reynders fue también excluido de la reelección como comisario europeo de Justicia. En su lugar, Georges-Louis Bouchez, presidente de su partido, optó por nombrar a Hadja Lahbib. Este revés, sumado a la actual investigación en su contra, marca un punto bajo en su trayectoria política.
Reynders adquirió notoriedad en España durante su mandato como comisario europeo de Justicia, especialmente por su mediación en las negociaciones entre el PSOE y el Partido Popular para reformar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el máximo órgano judicial en España. No obstante, la situación actual pone en duda su futuro político, mientras la investigación sigue su curso.
