1. El auge de los mercados internacionales
  2. Desafíos estructurales y oportunidades
  3. La polémica del nuevo registro de viajeros 
  4. Un sector estratégico y con buenas perspectivas para 2025
  5. El turismo, motor de empleo y riqueza
Varios turistas con maletas en el centro de Barcelona.

A pocos días del puente de diciembre, el sector turístico español se prepara para cerrar 2024 con cifras históricas. Según la Mesa del Turismo de España, el país ha recibido este año cerca de 95 millones de turistas internacionales, un salto significativo frente a los 85 millones de 2023. Este aumento ha impulsado una facturación récord que supera los 200.000 millones de euros, aportando más del 13% al PIB.

“Estamos ante un año extraordinario. El gasto por turista se ha incrementado y la actividad económica derivada del turismo ha alcanzado niveles inéditos”, destacó Juan Molas, presidente de la Mesa del Turismo, durante una rueda de prensa celebrada en el Hotel Novotel Madrid Center este martes.

El auge de los mercados internacionales

Una de las claves del éxito de 2024 ha sido el incremento de visitantes provenientes de mercados estratégicos. El turismo norteamericano ha crecido más de un 15%, mientras que el asiático ha experimentado también un notable aumento. Además, los mercados latinoamericanos, liderados por México, registraron un incremento del 12%. Este auge refuerza la previsión de que España podría alcanzar los 110 millones de turistas en 2040, superando a potencias turísticas como Francia y Estados Unidos, según un estudio de Deloitte.

El crecimiento no solo se mide en números, sino también en la calidad de los visitantes. Según Molas, los turistas internacionales no solo han llegado en mayor número, sino que también han aumentado su gasto medio, un dato que respalda la estrategia del sector para atraer a un público de mayor poder adquisitivo.

Desafíos estructurales y oportunidades

Sin embargo, no todo ha sido positivo. Uno de los principales problemas identificados por el sector es la dificultad para encontrar mano de obra cualificada en áreas clave como la hotelería, la hostelería y el transporte. Molas lamentó que las escuelas de hostelería no estén logrando atraer a suficientes jóvenes a una industria que, según él, ofrece estabilidad y un futuro prometedor.

Además, la demanda nacional ha mostrado signos de ralentización en los primeros nueve meses del año, algo que preocupa a los expertos. Este fenómeno, combinado con las tensiones geopolíticas como el conflicto entre Rusia y Ucrania, representa un riesgo potencial para la evolución del turismo en 2025.

La polémica del nuevo registro de viajeros 

El anuncio de la implementación del Real Decreto 933/2021 que supone la creación de un nuevo registro de viajeros ha generado fuertes críticas por parte del sector. Según Carlos Abella, secretario general de la Mesa del Turismo, la normativa supone una carga administrativa excesiva, especialmente para las pequeñas y medianas empresas.

El registro de viajeros es una nueva medida puesta en marcha por el Ministerio del Interior, que deberán cumplimentar agencias de viajes, hoteleras y alquiladoras de vehículos sin conductor. A partir de este lunes tendrán que transmitir a la aplicación ses.hospedajes aquellos datos que ya recaban de manera habitual las empresas hoteleras y se incorporan a esta obligación las agencias de viajes. 

“El decreto exige a las empresas recopilar entre 50 y 60 datos personales de los clientes, como números de tarjetas de crédito y relaciones de parentesco con menores. Esto no solo pone en riesgo la privacidad de los turistas, sino que también afecta la competitividad de España al ser el único país europeo con una regulación tan exigente”, advirtió Abella.

La prensa internacional, especialmente la británica, ya ha empezado a hablar de un “Gran Hermano español”, lo que podría ahuyentar a turistas clave como los británicos. Además, la medida podría alargar los procesos administrativos en hoteles, incrementando significativamente el tiempo necesario para gestionar reservas, especialmente en grupos grandes.

Un sector estratégico y con buenas perspectivas para 2025

A pesar de los retos, la Mesa del Turismo mira con optimismo hacia 2025. Molas destacó que las buenas cifras de este año se han conseguido gracias a la diversificación de mercados y al crecimiento de destinos menos saturados como Asturias y Santander.

“Hay buenas sensaciones. Si no surgen contratiempos, 2025 puede ser tan positivo como 2024. Contamos con un aumento en los vuelos hacia aeropuertos de menor volumen y una estabilidad en los principales mercados emisores europeos, como Reino Unido, Alemania y Francia”, aseguró Molas.

Además, los esfuerzos por desestacionalizar el turismo están dando frutos. Este año, meses tradicionalmente menos concurridos como septiembre, octubre y noviembre han registrado tasas de ocupación muy satisfactorias, con precios notablemente más altos que en años anteriores.

El turismo, motor de empleo y riqueza

En términos laborales, el sector ha creado más de 80.000 nuevos puestos de trabajo este año, y las previsiones apuntan a que en 2025 podría superar los tres millones de trabajadores afiliados. Sin embargo, el desafío de atraer a jóvenes al sector sigue siendo una tarea pendiente.

“Necesitamos un cambio en la percepción del turismo como opción laboral. Este sector no solo es una fuente de riqueza y empleo, sino también un motor de estabilidad económica y social”, subrayó Molas.

Con un impacto económico directo e indirecto que supera el 20% del PIB, 2024 se consolida como un año histórico para el turismo en España

Cientos de turistas a su llegada al aeropuerto de Málaga, donde prevé más de 2.150 operaciones en el  inicio de julio, dicha actividad supera a la de este mismo periodo de 2023, que fue el mejor año de la historia de esta infraestructura a 1 de julio de 2024 en Málaga, Andalucía./Álex Zea.
Cientos de turistas a su llegada al aeropuerto de Málaga. (Foto: Álex Zea / Europa Press).

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