Michael Schumacher y su familia han vuelto a las portadas de las web de los grandes medios deportivos este lunes. El ex piloto alemán y sus seres queridos han sido víctimas de un chantaje por el que pedían una millonada para no desvelar detalles sensibles del estado de salud del campeón del mundo de Fórmula 1.
La familia del alemán, afincada en una lujosa mansión de Mallorca en la urbanización Las Brisas, siempre ha sido muy recelosa y hermética respecto a la información que sale a la luz sobre Schumacher. Incluso recientemente allí se celebró la boda de la hija del alemán, en la que se pidió que los invitados dejaran el móvil a la entrada y de la que tan solo se publicaron fotos familiares por de Mick Schumacher con su hermana.
La imagen de Mick Schumacher en la boda de su hermana Gina / SD
Así pues el chantaje que ha sufrido la familia Schumacher llega desde dentro del propio equipo de seguridad. Según informa Daily Mail, en este delito han participado tres personas, empezando por el guardaespaldas de la familia Markus Fritsche. A este se le atribuye el robo de más de 1500 archivos de la familia, extraídos con cuatro dispositivos USB y dos discos duros.
Fritsche actuó de esa manera cuando se enteró que iba a ser despedido. El guardaespaldas sustrajo; el historial médico de Schumchaer, listas de medicamentos, fotos y vídeos, entre otros.
El guardaespaldas se compinchó con Yilmaz Tozturkan, guardia de seguridad de la familia y su hijo, Daniel Lins. Los tres pidieron quince millones de euros como rescate por esa información.
La Policía alemana detuvo a los tres delincuentes el pasado mes de julio, después de que uno de ellos hubiera llamado a la familia con un número oculto para pedir el dinero. La Fiscalía de Wuppertal pide hasta cuatro años de presión por los delitos cometidos.