Las Fuerzas de Defensa de Israel acusaron a Hezbolá de transferir armas desde Siria al Líbano, violando el reciente alto el fuego.
Detalle de la operación de Israel en Siria y Líbano
- Israel bombardea cruces fronterizos entre Siria y Líbano
- Violaciones al alto el fuego y disturbios en la región
- Desplazados regresan al sur del Líbano pese a advertencias
- Impacto de la guerra entre Israel y Hezbolá
Israel bombardea cruces fronterizos entre Siria y Líbano
El sábado, aviones de combate de la Fuerza Aérea israelí atacaron infraestructura militar en la zona de Al-Qusayr, cerca de los cruces fronterizos entre Siria y Líbano. Según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), estas instalaciones estaban siendo utilizadas “activamente” por Hezbolá para transferir armas, lo que representa una violación del reciente alto el fuego.
“Este ataque se llevó a cabo tras la identificación de la transferencia de armas de Hezbolá desde Siria al Líbano, incluso después del acuerdo de alto el fuego, y constituye una amenaza para el Estado de Israel”, declaró el ejército israelí en un comunicado. Sin embargo, las FDI no especificaron qué tipo de instalación fue atacada, y no hubo comentarios inmediatos por parte de las autoridades sirias ni de Hezbolá.
Las FDI acusaron además a Hezbolá, con el apoyo del régimen sirio, de utilizar cruces fronterizos civiles para introducir armas al Líbano. “Las FDI seguirán actuando para eliminar cualquier amenaza al Estado de Israel que viole los términos del acuerdo de alto el fuego”, añadió el ejército.
Violaciones al alto el fuego y disturbios en la región
El ataque aéreo israelí se produjo mientras la región enfrentaba disturbios generalizados, incluida una ofensiva de insurgentes en la ciudad de Alepo, Siria, que añadió mayor incertidumbre a una zona afectada por múltiples conflictos. Aunque los enfrentamientos no dejaron víctimas graves, las tensiones resaltan la precariedad del alto el fuego entre Israel y Hezbolá.
Ambos lados han acusado al otro de violar el cese de hostilidades en los días posteriores a su entrada en vigor. Mientras tanto, las FDI informaron el sábado que localizaron un alijo de armas de Hezbolá escondido en una mezquita en el sur del Líbano, durante escaneos realizados el día anterior. Además, tropas israelíes dispersaron a sospechosos que se acercaron a una zona restringida en el sur del Líbano, aunque no se dieron detalles adicionales.
La Agencia Nacional de Noticias del Líbano reportó que un avión no tripulado israelí atacó un automóvil en la aldea de Majdal Zoun, hiriendo a tres personas, incluido un niño. También se reportaron ataques aéreos israelíes en las afueras de la aldea de Baisariyeh, al sur de Sidón, pero no hubo comentarios inmediatos de las FDI.
Desplazados regresan al sur del Líbano pese a advertencias
A pesar de las advertencias de los ejércitos israelí y libanés de mantenerse alejados de ciertas zonas, muchos desplazados libaneses, entre ellos algunos de los 1,2 millones de personas afectadas por la guerra, comenzaron a regresar al sur del Líbano. La tregua, negociada por Estados Unidos y Francia, establece un alto el fuego inicial de dos meses, durante el cual Hezbolá deberá retirarse al norte del río Litani y las fuerzas israelíes regresar a su lado de la frontera.
El Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM) anunció que el mayor general Jasper Jeffers, del Comando Central de Operaciones Especiales (SOCCENT), supervisará el mecanismo de monitoreo del cese del fuego junto con el enviado estadounidense para Medio Oriente, Amos Hochstein. Este mecanismo incluirá la participación de los ejércitos libanés e israelí, observadores de la ONU y representantes franceses.
Israel ha declarado que se reserva el derecho de atacar cualquier violación percibida del alto el fuego. Según las FDI, las operaciones militares en el sur del Líbano buscan garantizar la seguridad de los residentes del norte de Israel, quienes fueron desplazados por los ataques de Hezbolá.
Impacto de la guerra entre Israel y Hezbolá
El alto el fuego, que entró en vigor el martes, puso fin a 14 meses de conflicto entre Israel y Hezbolá. Este comenzó el 8 de octubre de 2023, cuando el grupo terrorista, respaldado por Irán, inició ataques contra Israel bajo el pretexto de solidaridad con los palestinos en Gaza. Los constantes bombardeos forzaron el desplazamiento de aproximadamente 60.000 residentes del norte de Israel.
En represalia, Israel lanzó ataques aéreos y, a mediados de septiembre, intensificó sus operaciones con una ofensiva terrestre en el sur del Líbano, desmantelando gran parte de la infraestructura de Hezbolá en la región. Esta ofensiva buscaba prevenir una posible invasión similar al ataque de Hamás desde Gaza, ocurrido en octubre de 2023, que dejó 1.200 muertos y 251 rehenes en Gaza.
Hezbolá y Hamás han declarado su compromiso con la destrucción de Israel. Según las FDI, los ataques de Hezbolá han causado la muerte de 45 civiles israelíes y 76 soldados, mientras que las operaciones israelíes han causado la muerte de 2.500 combatientes de Hezbolá confirmados, con estimaciones cercanas a los 3.500. Además, se reportaron 100 bajas de otros grupos terroristas en el Líbano.
El Ministerio de Salud del Líbano informó que 3.823 personas han muerto en acciones israelíes desde octubre de 2023, aunque no especificó cuántas de estas eran civiles o combatientes. El viernes, Hezbolá celebró funerales masivos para docenas de sus combatientes muertos en los últimos meses de conflicto.