El OIEA informó que Irán busca aumentar su capacidad de enriquecimiento, lo que incrementa los riesgos de proliferación nuclear.
Detalle sobre las centrifugadoras nucleares de Irán
Detalles del plan nuclear iraní según el informe del OIEA
Irán informó al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que planea instalar más de 6.000 centrifugadoras adicionales en sus plantas de enriquecimiento, además de poner en funcionamiento más de las ya instaladas. Esto fue reportado en un informe confidencial del organismo, visto por Reuters y publicado el jueves.
El informe detalla las implicaciones de la reciente declaración de Irán, que anunció estas medidas como respuesta a una resolución aprobada la semana pasada por la Junta de Gobernadores del OIEA. Esta resolución fue impulsada por Gran Bretaña, Francia, Alemania y Estados Unidos, quienes expresaron preocupación por el programa nuclear iraní.
Aumentar la capacidad de enriquecimiento permite a Irán procesar uranio a un ritmo más rápido, incrementando el riesgo de proliferación nuclear. Aunque Irán asegura que no busca desarrollar armas nucleares, las potencias occidentales afirman que no existe una explicación civil para enriquecer uranio al 60% de pureza, un nivel cercano al 90% necesario para uso militar.
Capacidades actuales de enriquecimiento y planes de expansión
El informe especifica que las nuevas centrifugadoras inicialmente operarían a un nivel de enriquecimiento del 5%, un porcentaje significativamente menor al 60% que Irán ya produce. Este nivel más bajo podría interpretarse como un gesto conciliatorio hacia las potencias europeas, aunque los niveles de enriquecimiento pueden modificarse en cualquier momento.
Actualmente, Irán cuenta con más de 10.000 centrifugadoras en funcionamiento en dos plantas subterráneas, ubicadas en Natanz y Fordow, así como en una planta piloto en la superficie de Natanz. El nuevo plan incluye la instalación de 32 cascadas adicionales de más de 160 máquinas cada una y una cascada masiva con hasta 1.152 centrifugadoras IR-6 avanzadas.
Según el OIEA, el número de cascadas planeado por Irán supera ampliamente las que ya están instaladas. Irán declaró que comenzará a alimentarlas con uranio como materia prima, aunque el organismo verificó que, hasta ahora, esto no ha ocurrido.
Fordow y Natanz bajo especial vigilancia del OIEA
El informe también menciona que las actividades en la planta subterránea de Fordow, que está excavada en una montaña, están bajo estricta vigilancia. Irán actualmente enriquece uranio hasta el 60% en esta planta y en la Planta Piloto de Enriquecimiento de Combustible en la superficie de Natanz.
Irán ha comunicado al OIEA que planea poner en funcionamiento ocho cascadas recientemente instaladas de centrifugadoras IR-6 en Fordow. En respuesta, el organismo de control nuclear ha solicitado cambios en la intensidad de sus actividades de inspección en esa planta.
En Natanz, Irán finalizó la instalación de dos cascadas de centrifugadoras IR-2m, completando un lote de 18 cascadas en su Planta de Enriquecimiento de Combustible subterránea. Según el informe, estas 18 cascadas están listas para operar, aunque no han sido alimentadas con uranio. Irán también planea instalar 18 cascadas adicionales de centrifugadoras IR-4 en la misma planta, cada una con 166 máquinas.
Propuestas y desacuerdos en el diálogo diplomático
Antes de la reunión de la Junta de Gobernadores del OIEA la semana pasada, Irán propuso limitar sus reservas de uranio enriquecido al 60%. Sin embargo, según diplomáticos, esta oferta estaba condicionada a que la junta no aprobara una resolución en su contra. Aunque el OIEA calificó esta medida como un “paso en la dirección correcta”, la junta adoptó la resolución de todos modos, instando a Irán a mejorar su cooperación.
En la planta piloto de Natanz, Irán planea implementar medidas para aumentar el número de cascadas completas, lo que permitiría una mayor producción de uranio enriquecido. También pretende instalar una cascada de hasta 1.152 centrifugadoras IR-6, que sería la más grande de su tipo en Irán hasta ahora.
El informe resalta que las potencias occidentales, particularmente Reino Unido y Francia, expresaron su preocupación por estas actividades durante conversaciones con diplomáticos de Teherán el viernes. En un discurso en París, el jefe del Servicio Secreto de Inteligencia británico, Richard Moore, afirmó que las ambiciones nucleares de Irán representan una “grave amenaza para la seguridad global”.
Reacciones internacionales al programa nuclear de Irán
Moore destacó que las milicias aliadas de Irán, como Hamás y Hezbolá, han sufrido importantes reveses en Oriente Medio, pero advirtió que las ambiciones nucleares del régimen continúan representando un peligro. Mientras tanto, el jefe del servicio de inteligencia francés subrayó que el riesgo de proliferación nuclear iraní es una amenaza seria en los próximos meses.
Tras las conversaciones del viernes, diplomáticos de Irán, Gran Bretaña, Francia y Alemania acordaron continuar el diálogo diplomático “en un futuro cercano”, según el Ministerio de Asuntos Exteriores alemán. Estos encuentros buscan establecer un marco para abordar las preocupaciones relacionadas con el programa nuclear iraní antes del regreso del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, al poder en enero.