Se cumple un mes desde que la DANA estalló en nuestro país. Fueron 222 personas las que fallecieron en la riada, pero aún existen cuatro desaparecidos en Valencia.

Elisabet Gil Martines es una de ellas, tiene 38 años y dos hijos, los cuales siguen sin creerse que no volverán a ver a su madre. Ellos mismos se despedían de su abuela de 63 años hace unos días, que aparecía tras varias semanas de incansable búsqueda.

Ambas desaparecieron la noche del 29 de octubre cerca del barranco del Poyo. Pese a que habían avisado de que habría inundaciones, no les dieron la alerta para que no fueran a trabajar. Ernesto asegura que la alarma saltó a las 20:10 horas, cuando, posiblemente, ya estuvieran fallecidas.

A día de hoy existe un grupo específico buscando a Elisabet. «Hay un ejército buscándola, nunca mejor dicho», ha señalado Ernesto, agradecido con las personas que intentan dar con su sobrina. Sin embargo, comienzan a perder la esperanza: «Solo queda intentar buscar donde no buscaste».

El paso del tiempo hace que los efectos de la DANA se desdibujen, volviendo poco a poco a la normalidad. Sin embargo, para personas como Ernesto, el tiempo juega en su contra y pide que no se olviden de ellos.

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