La Armada de los EE. UU. incorporará el E-130J, basado en el C-130J Super Hercules, como su nueva plataforma TACAMO a partir de 2026.
Información detallada sobre el E-130J TACAMO
- El significado detrás del nombre y la función del E-130J
- Especificaciones y capacidades del E-130J
- Producción y fechas clave del programa TACAMO
- El reemplazo del Mercury E-6B comienza su transición
- Coordinación de misiones a través de capacidades avanzadas
- Un espectro amplio de comunicación estratégica
El significado detrás del nombre y la función del E-130J
El E-130J, desarrollado por Lockheed Martin, ha sido diseñado para reemplazar al Boeing E-6B Mercury en la función TACAMO (Take Charge and Move Out), esencial para la Armada de los Estados Unidos. Esta aeronave está destinada a actuar como una plataforma de comando y control aerotransportada, asegurando la comunicación estratégica para la fuerza militar del país.
La denominación “TACAMO” fue seleccionada por la Oficina del Programa de Mando, Control y Comunicaciones (PMA-271) y el Escuadrón de Comunicaciones Estratégicas 1 (SCW-1). Este nombre refleja la misión principal del avión, que es tomar el control y movilizarse rápidamente. El E-130J se basa en el probado C-130J Super Hercules, con modificaciones específicas para cumplir con los requisitos de la Armada.
La estructura del nombre E-130J tiene un significado particular: la letra “E” se refiere a la instalación electrónica especial, el número “130” indica su origen a partir del modelo EC-130, y la “J” identifica la serie, que corresponde al C-130J. Este sistema de denominación destaca su propósito y origen tecnológico.
El Comando Aéreo Naval señaló que el programa de recapitalización TACAMO está en marcha. “PMA-271 está adquiriendo el E-130J a través de este programa, que incluye integrar el subsistema de muy baja frecuencia (VLF) de Collins Aerospace en aviones C-130J-30 proporcionados por el gobierno”, según su declaración. Este proceso fue parte de una licitación que concluyó en abril de 2024.
Especificaciones y capacidades del E-130J
El nuevo avión E-130J contará con una tripulación mínima de tres personas, incluyendo dos pilotos y un jefe de carga. En términos de capacidad, podrá transportar hasta 92 pasajeros en su configuración básica o 128 en la versión extendida (-30). También se podrán transportar 64 tropas aerotransportadas (-30: 92), seis palets 463L (-30: 8), o 72 pacientes en camilla (-30: 97).
El compartimento de carga del E-130J tiene una longitud de 41 pies (12,50 metros), un ancho de 10 pies (3,05 metros) y una altura de 9 pies (2,74 metros). Su capacidad máxima de carga útil es de 42 000 libras en la versión estándar, mientras que la variante extendida puede soportar hasta 44 000 libras. Estas especificaciones lo convierten en una aeronave versátil y altamente funcional.
Con base en el modelo C-130J Super Hercules, el E-130J está diseñado no solo para el transporte de carga, sino también para operar como un centro de mando aéreo resistente a fallos. Esta capacidad lo hace ideal para gestionar comunicaciones estratégicas críticas, incluyendo el control de misiles balísticos intercontinentales.
El sistema de muy baja frecuencia (VLF) integrado permitirá comunicaciones confiables y seguras incluso en condiciones extremas. Esta característica es esencial para las operaciones de la Armada, ya que garantiza que las órdenes estratégicas puedan transmitirse sin interrupciones.
Producción y fechas clave del programa TACAMO
La producción del primer avión E-130J comenzó recientemente, según informó el Defense Post la semana pasada. Lockheed Martin ha iniciado la construcción en el marco del programa TACAMO, y se espera que el proceso de fabricación sea seguido por una etapa de pruebas rigurosas.
La entrega inicial del E-130J está programada para el año 2026, marcando el inicio de su integración en la flota de la Armada estadounidense. A partir de ese momento, se planea la producción de más unidades que se irán incorporando gradualmente para reemplazar a la actual flota de aviones E-6B Mercury.
El nuevo E-130J será empleado como un centro de mando y control aéreo de última generación. Su función incluirá la gestión de misiles balísticos intercontinentales y otras comunicaciones estratégicas clave. Este enfoque busca garantizar la continuidad operativa incluso en escenarios adversos.
La Armada ha establecido su base principal de operaciones en la Base Aérea Tinker, en Oklahoma, pero también cuenta con bases de alerta en Travis AFB, California, y NAS Patuxent River, Maryland. Estas ubicaciones refuerzan su capacidad para responder rápidamente en caso de emergencia.
El reemplazo del Mercury E-6B comienza su transición
La introducción del E-130J marca el inicio de la sustitución de los aviones Mercury E-6B, que han sido clave para las operaciones estratégicas de la Armada de los Estados Unidos. Aunque estos aviones continuarán en servicio hasta la década de 2030, el desarrollo del E-130J comenzó en 2020 como parte de un esfuerzo por modernizar las capacidades de la misión TACAMO.
Con una longitud de 97 pies 9 pulgadas (29,79 m) y una envergadura de 132 pies 7 pulgadas (40,41 m), el E-6B cuenta con características que el nuevo modelo busca superar. El E-130J está impulsado por cuatro motores turbohélice Rolls-Royce AE2100D3, con hélices Dowty R391 de seis palas que aseguran una potencia de 4.637 shp cada uno.
Según el capitán Britt Windeler, comandante del SCW-1, “Estoy entusiasmado porque el SCW-1 sigue trabajando junto con el PMA-271 para ofrecer nuevas capacidades y fortalecer la disuasión nuclear de Estados Unidos. El E-130J garantizará que los líderes de nuestra nación mantengan el control de sus fuerzas estratégicas a medida que el E-6B se acerca al final de su vida útil”.
El nuevo modelo, derivado del C-130J Super Hercules, asegura no solo una continuidad operativa, sino también una plataforma más avanzada tecnológicamente. La Armada dispone de un margen de tiempo hasta 2030 para completar esta transición, permitiendo una integración gradual de las capacidades del E-130J.
Coordinación de misiones a través de capacidades avanzadas
El E-130J también desempeñará un papel crucial en la coordinación de secuencias de lanzamiento entre las principales oficinas de defensa y la Casa Blanca. Con una velocidad máxima de 362 nudos (670 km/h) y un alcance operativo de 1.800 millas náuticas con carga máxima, el avión ofrece una capacidad mejorada para misiones de mando y control.
El techo de servicio del E-130J alcanza los 28.000 pies (8.500 m) con una carga útil de 42.000 libras, mientras que su techo absoluto es de 40.386 pies (12.310 m). Estas características lo convierten en una plataforma ideal para operar en escenarios de alta exigencia estratégica.
De acuerdo con el presupuesto de la Marina para el año fiscal 2024, “La misión TACAMO proporciona una capacidad aerotransportada para un mando, control y comunicaciones aéreos duraderos, fiables y que permitan sobrevivir entre la Autoridad Nacional de Mando (NCA) de los Estados Unidos y las fuerzas estratégicas estadounidenses. Esta misión es fundamental para la disuasión y la gestión de un conflicto nuclear”.
El E-130J está diseñado para resistir pulsos electromagnéticos (EMP) y ciberataques, fortaleciendo así su seguridad. Asimismo, incluye un sistema de cables de arrastre de 8 km que permite la comunicación en frecuencias muy bajas (VLF) con submarinos y otras embarcaciones sumergidas, garantizando comunicaciones confiables incluso en condiciones adversas.
Un espectro amplio de comunicación estratégica
Entre las capacidades del E-130J destaca su habilidad para operar en frecuencias extremadamente altas avanzadas (AEHF), además de las VLF. Esta flexibilidad permite una variedad de modulaciones críticas para misiones estratégicas. Las aeronaves TACAMO pueden utilizar prácticamente todas las bandas de frecuencia, lo que minimiza las posibilidades de interferencia por parte del enemigo.
El sistema de comunicaciones incluye encriptaciones avanzadas y redes seguras, proporcionando una ventaja táctica en situaciones de alta complejidad. Según la Marina, “Las aeronaves TACAMO son una plataforma de comunicaciones dedicada que tiene la capacidad de comunicarse en prácticamente todas las bandas de frecuencia de radio, desde frecuencias muy bajas (VLF) hasta frecuencias extremadamente altas (AEHF), utilizando una variedad de modulaciones, encriptaciones y redes”.
Estas características aseguran que el E-130J no solo sirva como un reemplazo del E-6B, sino también como una mejora significativa en las capacidades de comunicación y mando estratégico de la Armada estadounidense, consolidando su papel en la disuasión nuclear y en operaciones críticas futuras.