El recuento de los votos en Rumanía de la primera vuelta de las elecciones presidenciales ha confirmado que el prorruso Calin Georgescu se impuso sobre sus rivales, mientras que los votos de la diáspora han colocado a la candidata derechista Elena Lasconi como segunda.
Según los datos de la Autoridad Electoral Permanente (AEP) y con el recuento del 99,92 %, Georgescu recibió el 22,94% de los votos, seguido por Lasconi y el actual primer ministro socialdemócrata Marcel Ciolacu, ambos con 19,16%, con una diferencia de 700 votos a favor de la candidata de la centro derecha.
De esta manera, Ciolacu, que antes de las elecciones era considerado como el favorito, podría quedar fuera de la segunda vuelta, del 8 de diciembre.
La mayor sorpresa del domingo fue la victoria de Georgescu, un candidato que al que los sondeos lo veían por debajo del 5% y que casi no apareció en las televisiones y los medios tradicionales durante la campaña.
Aparentemente, Georgescu, con manifestaciones antisemitas y posturas adversas a la OTAN, ha logrado conquistar a muchos de sus conciudadanos a través de las redes sociales, principalmente en Tik-Tok, con vídeos que se hicieron virales.
«El pueblo rumano gritó esta noche, paz, y lo hizo muy fuerte», dijo Georgescu la pasada noche, según recoge el portal romaniatv.net.
El ganador de la primera vuelta agregó que encendió «la vela de la esperanza y el coraje de ser rumano. El pueblo rumano ha optado por dejar de arrodillarse, no ser humillado».
«Gran sorpresa»
La prensa local habla de «una gran sorpresa», de «un candidato invisible para la prensa» y el portal Libertatea.ro cita a medios rusos que se han congratulado de la victoria de un «partidario de una alianza con Rusia».
Sea como sea, las autoridades no han concluido con el recuento de los votos emitidos en el extranjero.
La participación en las elecciones fue del 52,55%, ya que más de 9,4 millones de rumanos de los 18 millones con derecho a voto han acudido a las urnas.
El 8 de diciembre, los rumanos decidirán quien será el futuro jefe del Estado entre los dos candidatos más votados.
El inesperado avance de Georgescu abre nuevos interrogantes sobre el panorama político, no solo ante la cuestión de quien será el futuro jefe del Estado de Rumanía -algo que se decidirá el 8 de diciembre entre los dos candidatos más votados- sino también de cara a las elecciones legislativas del próximo domingo.