En octubre de 2023, justo el día en el que se celebra el día Mundial contra el Cáncer de Mama, dio comienzo la campaña “Llaveros Solidarios”. Surgió como un acto de agradecimiento de Mónica Lozano, paciente oncológica, hacia su equipo médico. Gracias a dicha campaña, realizó la donación de 10.500 euros, repartidos entre diferentes asociaciones y entidades que colaboran y trabajan en la investigación del Cáncer de Mama: Saray Asociación Navarra de Cáncer de Mama, AECC, CIMA (Centro de Investigación Medicina Aplicada de la Universidad de Navarra), y NAVARRABIOMED (Centro Mixto de investigación biomédica del Gobierno de Navarra y de la Universidad Pública de Navarra).
Actualmente Mónica vive en Cintruénigo aunque tiene raíces aragonesas. Maestra de Educación Infantil por vocación, su enfermedad la mantiene lejos de las aulas, “tratando -nos dice-, de no caer en lo que no puedo hacer, sino en lo que me puede ayudar a sentirme mejor, en la situación en la que me encuentro, y necesito plasmar mi creatividad en algo que, si además, puede ayudar a incrementar la investigación sobre esta enfermedad, me doy por satisfecha”.
De ahí surgió la idea de elaborar un llavero muy significativo. “Me gusta que las cosas cuenten historias y que todo esté relacionado, por ello las telas de los primeros llaveros contaban lo que ha sido mi vida en los últimos años. Predominan los tonos blancos y rosas haciendo referencia al cáncer de mama y a los sanitarios, cuadrito Vichy en homenaje a todo/as mis alumnos, recordándome estos cuadritos a las batitas del cole y la tela que más representa mi proceso, con un lema que me ayudó a llevar mi tratamiento lejos de mi familia y amigas por la pandemia”.
En abril tuvo que dar por finalizada esta campaña, cuando tenía la cantidad de 6.115 euros todavía por donar. “Decidí guardarlos para un nuevo proyecto que se iba a poner en marcha tras unos meses de descanso; me apetecía conseguir una cifra más bonita, más redonda. Así que empecé a pensar y trabajar en la nueva idea”. Fue a finales de septiembre cuando regresó con una nueva campaña, una nueva historia propia y con mucho significado. Llegó “Coge aire” o “-.-.—–…-…-..” (el lema escrito en código Morse), el eslogan de la última campaña.
Se decantó por elaborar unas bolsas de tela y neceseres con el eslogan y el logotipo creado por ella misma para esta ocasión. “Lleva por nombre una frase que a los que recibimos con frecuencia tratamientos, a quienes nos someten a numerosas pruebas medicas, analíticas… nos suena bastante. Una frase que el profesional sanitario que nos atiende nos dice, tal vez por inercia, pero que a nosotros nos aleja del momento que vivimos, hace que el dolor que padecemos lo sea menos, y nos ayuda a llevarlo todo de otra manera. Agradezco una y mil veces cada vez que me la dicen para que todos estos procesos no resulten tan dolorosos”. Significa tanto para Mónica que ya no solo forma parte de su vida sino que también la lleva en su piel para recordarle que todo va pasando, va doliendo menos y que sigue pudiendo coger aire para seguir hacia adelante. “Necesitamos coger aire para vivir y que la investigación también coja aire y nos ayude precisamente a eso, a VIVIR”.
La frase va acompañada por el dibujo de una libélula. Este insecto representa el renacer, volver a levantarse y conocer el verdadero sentido de la vida. “Unas amigas me regalaron una pulsera, uno de cuyos colgantes era una libélula, para enviarme ánimos en mi proceso oncológico; descubrí su significado y desde entonces miro a estos insectos con otros ojos, me
identifico con ellas. Me recuerdan el aquí y ahora, las segundas oportunidades y tener presente las cosas que dan sentido a mi vida”.
Esta campaña ha sido más breve que la anterior, pues se ha desarrollado tan solo en dos meses. Pero ha conseguido alcanzar esa cifra bonita y redonda que buscaba Mónica. Sumando la cantidad que quedaba pendiente de donar de los “Llaveros Solidarios” y la conseguida por “Coge aire”, se han donado 9.000 euros a la Unidad de Oncología Médica Traslacional, para investigación en cáncer de mama de aparición temprana. Fue Susana de La Cruz, oncóloga que trata a Mónica, quien le ofreció información sobre los objetivos y fines del proyecto al que van destinados los fondos donados. También le presentó a Ibone Labiano y Maria Alsina, responsables del mismo y pertenecientes a Navarrabiomed, el centro de investigación biomédica (Centro Mixto del Gobierno de Navarra y de la Universidad Pública de Navarra (UPNA).
Y si hablamos de cifras bonitas, no lo será menos la que se alcanza al contabilizar el total de lo recaudado y donado entre las dos campañas emprendidas por Mónica: 19.500 euros, destinados a la investigación del Cáncer de Mama. “La investigación es necesaria, podría decirse que primordial, para los enfermos que, como yo, nos enfrentamos a una enfermedad que irrumpe en tu vida y la hace tambalearse. Gracias a la investigación, yo y muchos otros enfermos, seguimos aquí, seguimos cogiendo aire y agarrándonos a una segunda oportunidad”.