El alcalde de Metula, David Azoulay, criticó al gobierno tras informes de un posible alto el fuego con Hezbolá, calificando el acuerdo como “una rendición” en declaraciones al Canal 12.
Por su parte, Avichai Stern, alcalde de Kiryat Shmona, expresó su descontento con el pacto propuesto, que describió como “acelerador de un nuevo 7 de octubre en el norte”.
A través de Facebook, señaló: “No entiendo cómo pasamos de la victoria total a la rendición total”. Stern cuestionó el futuro de los habitantes y advirtió sobre una ciudad sin seguridad ni perspectiva.
Las comunidades de Metula y Kiryat Shmona, ubicadas en la frontera con el Líbano, han sufrido intensos ataques de Hezbolá en el último año, destacando entre las zonas más afectadas.
Mañana se espera que el gabinete de seguridad nacional apruebe el alto el fuego, cuyo texto fue finalizado hoy, según medios hebreos. El Canal 12 informó que el acuerdo solo podría colapsar por un evento “drástico” previo a la reunión.
El ejército ha informado al primer ministro Netanyahu que la infraestructura de Hezbolá en la frontera ha sido destruida, logrando retroceder a sus fuerzas y reducir significativamente su arsenal de cohetes.
Según las FDI, es el momento adecuado para implementar el alto el fuego, aunque advierten que si fracasa, tienen planes para expandir operaciones en el Líbano.
El ministro de Asuntos Exteriores, Gideon Sa’ar, resaltó la importancia de implementar dos medidas clave: prevenir el retorno de Hezbolá al sur del Líbano y evitar su rearme.
“No permitiremos regresar a la situación del 6 de octubre. Cualquier violación será sancionada de inmediato”, afirmó en un comunicado ante su facción Nueva Esperanza.