La invisibilidad de la violencia machista en los pueblos: «Dormía con la escalera de pintar trancando la puerta»

En un pueblo todo se sabe o no. «Parece que me como el mundo y mi mundo me estaba comiendo a mí», cuenta Paqui a este periódico rememorando una sucesión de episodios cada vez más violentos y peligrosos. «Ahora ya solo me callo para proteger a mis hijos que por fin tienen paz y tranquilidad», asegura.

Fuente