Can Dündar es uno de los periodistas más destacados de Turquía, conocido por su compromiso con la libertad de prensa y los derechos humanos en un entorno político marcado por la censura y la represión. Durante décadas, ha sido una voz crítica contra el autoritarismo, ejerciendo un periodismo independiente. Como director del diario Cumhuriyet, Dündar ganó reconocimiento internacional al publicar investigaciones que revelaban operaciones secretas del gobierno turco. Un desafío al actual presidente Recep Tayyip Erdogan que le valió una sentencia de 27 años y 6 meses de prisión.
Tras un intento de asesinato frente a los tribunales en mayo de 2016, Dündar decidió abandonar el país mientras seguía recurriendo su sentencia. Actualmente, desde su exilio en Alemania, continúa alzando la voz contra las injusticias, utilizando plataformas internacionales para defender la democracia y exponer las violaciones de los derechos fundamentales en su país. A través de su obra escrita y su activismo, ha mantenido viva la denuncia sobre la situación política en Turquía.
Pregunta.- ¿Cómo es vivir en el exilio?
Respuesta.- Obviamente es una vida difícil. Estar lejos de tu país, de tus seres queridos, de tu biblioteca, de tu espacio de trabajo… Es una atmósfera completamente nueva y es difícil. Pero si eres periodista o escritor y tienes papel y boli, puedes sobrevivir. Al menos profesionalmente. Soy libre y puedo hacer mi trabajo correctamente aquí, por eso no me puedo quejar.
P.- En Alemania existe una gran comunidad migrante turca. ¿Ha pesado para elegirlo como su nueva residencia?
R.- Indirectamente sí, porque he recibido muchas ofertas de los medios alemanes para trabajar con ellos, así que profesionalmente era la mejor opción para mí. Me ofrecieron esos trabajos por la gran comunidad turca que hay en Alemania.
P.- En estos años de exilio, ¿ha seguido recibiendo presiones?
R.- Llevo 8 años. Y sí, he seguido recibiendo presiones. Cada año Turquía pide mi extradición, incluso se lo reclama a la Interpol. Hay una gran presión sobre el Gobierno alemán para que me devuelvan a Turquía, tanta que hubo una ocasión en la que el presidente de Turquía le pidió abiertamente al canciller en una rueda de prensa en Alemania que me extraditara.
P.- La libertad de expresión sigue amenazada en Turquía…
R.- Hay alrededor de 20 periodistas en prisión. Hace 10 años eran 100, pero esto no significa que ahora haya más libertad de prensa que antes. Lo que pasa es que la autocensura ha aumentado, porque escribir algo en contra del gobierno ahora resulta más peligroso que nunca. Los periodistas optan por ceñirse a hablar de lo que el gobierno quiere oír para no meterse en problemas.
Erdogan tiene el visto bueno de Europa para destruir la democracia turca
P.- ¿Cómo observa Turquía desde el extranjero? ¿Y cómo la ve Europa?
R.- Desde la última década la situación en Turquía ha ido empeorando cada año tras año. Hay políticas más duras y más autocracia. En cuanto a Europa, creo que tiene un interés por mantener a Erdogan en el poder porque lo necesitan para el acuerdo de refugiados. Así que mientras mantenga a los refugiados fuera de Europa yo creo que muchos países prefieren verlo en el poder aunque sea autócrata. Tiene el visto bueno de Europa para destruir la democracia turca.
P.- En la dicotomía entre autocracia y democracia, ¿dónde se encuentra hoy Turquía?
R.- Creo que no es una autocracia del todo. Hay un sistema de una persona y un partido que controla la judicatura, los medios de comunicación, el parlamento, el ejército,… Pero aún hay espacio para la oposición y todavía hay gente resistiendo allí. No lo llamaría una autocracia total, pero me temo que estamos en camino de eso.
P.- Fundó la plataforma Özgürüz (Somos libres, en español) para publicar información incómoda sobre Turquía y que los turcos pudiesen conocer lo que los medios de comunicación no pueden publicar. ¿Ha recibido alguna amenaza para que la elimine?
R.- Por supuesto. El hecho de que publique la información en turco, tanto en esta plataforma como en mis redes sociales, para que me puedan leer desde Turquía, no gusta. De hecho, la semana pasada bloquearon mi cuenta de X, por lo que me complican mucho llegar a mi audiencia de Turquía. Elon Musk tiene una especie de acuerdo con Erdogan, por eso es tan fácil para él eliminar o bloquear cuentas en esta red social y no permitir a los internautas ver estos contenidos. En el caso de Özgürüz, también la han bloqueado en Turquía, así que ahora estamos usando YouTube para llegar a nuestra audiencia. No sabemos qué pasará en unos años, ni si YouTube estará bloqueado en Turquía algún día, pero de momento es la única herramienta que podemos usar.
P.- ¿Erdogan ha endurecido sus políticas?
R.- Sí. Por ejemplo, están secuestrando a turcos que tienen ideas distintas a las de Erdogan y que residen en otros países. También incentivan a esas personas de manera insistente a que vuelvan a Turquía, rastreándolos y atacándolos. Ahora mismo también hay un control muy grande de la gente que no agrada al régimen. Así que si eres un opositor al gobierno será muy difícil abandonar Turquía, pero también sentirás el gran brazo de Turquía en cualquier otra parte del mundo.
P.- ¿Quién es Erdogan?
R.- Es el tipo de islamista que quiere ser el sultán de todo el mundo islámico. Creo que es su proyecto soñado, pero también es un pragmático y puede hacer todo lo posible para mantenerse en el poder como un autócrata apasionado.
P.- ¿Por qué a la oposición le cuesta tanto derrotar a Erdogan? ¿Cuáles han sido los principales errores?
R.- Yo no hablaría de errores porque muchos de ellos están en la cárcel o en el exilio. Es muy fácil gobernar un país cuando pones a tus rivales en la cárcel y los dejas ahí. Las mentes más brillantes de la oposición turca están en la cárcel. Cuando eres un autócrata que puede dar órdenes a los jueces, tú decides quién va a la cárcel y quién no. Han cometido errores, sí, pero no les culparía porque han luchado y sacrificado mucho.
Las mentes más brillantes de la oposición turca están en la cárcel
P.- Hace unas semanas Erdogan dijo en un discurso que se presentaría a las elecciones de 2028 si Allah se lo permitía. ¿Cree que la oposición tendrá para entonces un candidato sólido, como Ekrem Imamoglu?
R.- El problema es que Erdogan tiene mucha facilidad para bloquear a sus oponentes. En el caso de Imamoglu, como es el candidato más prestigioso que hay contra él, está ya trazando un plan para meterlo en la cárcel o alejarlo de la política. Obviamente Imamoglu teme acabar en prisión, porque como Erdogan es como un dios o más que un dios, puede controlar a sus jueces para que tomen las decisiones, por desgracia.
P.- ¿Qué herramientas tiene Erdogan para mantenerse en el poder?
R.- Yo diría que lo primero es la religión; después amenazar a Occidente; distribuir el dinero entre gente para conseguir generar un pensamiento concreto entre sus seguidores; amenazar a la oposición usando el poder judicial para mantener su mandato; usar los medios de comunicación, al ejército, a la policía y a la mafia…
P.- ¿Crees que Erdogan está camino de convertirse en un dictador?
R.- Si se le permite, sí. Le encantaría. Pero gracias a Dios en Turquía todavía hay una oposición fuerte. Además, hay una gran crisis económica, por lo que Erdogan está perdiendo mucho apoyo. Diría que necesita un milagro para lograr mantenerse en el poder y ser un dictador. Porque, aunque ahora esté a medio camino entre demócrata y autócrata, todavía existe democracia en Turquía y con eso tiene imposible mantenerse en el poder, aunque haya muchas herramientas que pueda usar.
P.- Turquía es la eterna candidata a incorporarse a la UE. ¿Lo ve un escenario posible y probable?
R.- Hace 10 o 20 años, cuando hablábamos de la UE, nos referíamos a la democracia, los derechos humanos o la libertad de prensa. Ahora cuando dices UE, significa control de fronteras. Europa se está centrando solo en proteger sus fronteras, pagando a dictadores y autócratas para mantenerlas a salvo. La UE está dispuesta a sacrificar sus valores por sus intereses. En Turquía, la gente está empezando a mirar a Rusia o a países musulmanes como Arabia Saudí, cuando antes miraban a Europa. Y esto no es nuestra culpa, es de Europa. Así que no veo para nada probable un ingreso o un acercamiento de Turquía con la UE más allá de un acuerdo de inmigración.
P.- ¿Qué está haciendo Europa con el aumento de refugiados?
R.- Mucha gente quiere abandonar su país por las condiciones de guerra o por presiones y Europa es como el sitio soñado para encontrar solución a esto. El flujo de refugiados es enorme y esto se debe principalmente a razones políticas o económicas. Y justo ahora están tratando de construir grandes muros alrededor de Europa, pero yo no veo esto como una solución a la inmigración. Europa se está dedicando solo a producir nuevos dictadores o mejorando a los autócratas y cerrando sus fronteras. Se necesita democracia global para encontrar una solución, al contrario de esas políticas de protección de fronteras.
P.- Ucrania ha atacado a Rusia con misiles estadounidenses, lo que podría endurecer aún más el conflicto. Erdogan actuó en numerosas ocasiones como mediador en esta guerra, ¿cree que seguirá siendo así?
R.- Creo que es más posible que siga siendo mediador aquí que que lo sea en algún momento entre Israel y Hamás. Básicamente porque tiene una relación de amor-odio con Putin, pero se suelen llevar bien. Además, por proximidad y por ser el único miembro de la OTAN que se opuso a las sanciones contra Putin, facilita mucho las cosas. En cuanto a Zelensky, tiene contactos con su gobierno. Por eso a Europa le gusta Erdogan, porque lo ven como el mediador que puede poner fin a este conflicto.
P.- ¿Qué papel tiene Turquía en el conflicto de Oriente Medio?
R.- Erdogan quiere tener un papel mediador. El problema es que se muestra antisemita, lo que hace que Israel ni se plantee tenerle como mediador. Erdogan siempre ha sido partidario de Hamás y antisemita, por eso no veo posible que llegue a ser mediador en este conflicto.
P.- En los últimos días ha trascendido la posibilidad de que Hamás traslade su oficina política de Qatar a Turquía. ¿En qué podría beneficiar o perjudicar a Turquía dar cobijo a los líderes de Hamás?
R.- Yo creo que podría perjudicar mucho a Turquía. Una de las razones por las que estoy en el exilio es que yo estaba en contra de los acercamientos de Erdogan con organizaciones islamistas. Hamás está utilizando el terror para difundir la ideología islamista y si Erdogan tuviese algún tipo de acuerdo con ellos para que tuviesen su cuartel en ciudades turcas, sería muy perjudicial para Turquía.
P.- ¿Mantiene la esperanza de poder volver a Turquía y ejercer el periodismo libre?
R.- Sí. Aunque Erdogan lleve en el poder 22 años, creo que estamos llegando al final. Tengo la sensación de que estamos llegando al final del período más oscuro de la historia de Turquía. Lo que me pregunto es si la oposición está dispuesta a tomar el relevo. Aunque no sé cómo podremos librarnos de Erdogan, porque controla la policía, el ejército y el poder judicial, sé que la gente siente rabia contra el gobierno. Además, en las últimas elecciones locales se demostró que la mayoría de la gente apoya ahora a la oposición. Así que está llegando el final y esperemos que con su fracaso tengamos la oportunidad de volver a nuestro país.