Este sábado, la periodista Julia Otero ha comenzado su programa en Onda Cero, Julia en la Onda, hablando de la intervención que el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, protagonizó el viernes para dar cuenta sobre su gestión de la DANA en Valencia. Había mucha expectación sobre esa comparecencia por su posible dimisión y por las explicaciones que el responsable autonómico pudiera dar, pero finalmente, lo que anunció el dirigente valenciano fue una reestructuración de su Gobierno, negándose a asumir cualquier responsabilidad y culpando a la AEMET de lo ocurrido y acusando a la Confederación Hidrográfica del Júcar de emitir información «fragmentada, inexacta o tardía«.

En su columna, la comunicadora ha expresado muy contundentemente su postura al respecto. «Faltan 45 días para acabar este tremendo año bisiesto que nos ha tocado vivir y a muchos, sufrir. Ojalá no hubiera razones para el cabreo y pudiéramos plantearnos un finde sólo de sonrisas, buen rollo, pero algún rato habrá que dedicar a las miserias que hemos visto y escuchado durante toda esta semana«, ha arrancado.

«Llueve sobre mojado, tanto en lo literal como en lo metafórico. En lo literal porque ha vuelto otra DANA y en lo metafórico porque ha vuelto también la misma conducta ante la tragedia que recordamos de otras veces: la del 11M, la del Yak-42, la del Prestige, la del Metro de Valencia», ha continuado, recordando diferentes episodios que han manchado gobiernos del Partido Popular en el pasado.

«Son hilillos de infamia que embarran lo que tocan«, ha seguido hilando, antes de hablar de las explicaciones que dio Mazón sobre su paradero el día en el que la DANA arrasó Valencia.

«Ahora resulta que Mazón estaba en su sitio y dio la cara en todo momento y la culpa siempre es de los otros. Insultos a la inteligencia después de la incapacidad manifiesta«, ha sentenciado. Cabe recordar que el presidente autonómico estuvo comiendo con la periodista Maribel Vilaplana hasta las 18:00 horas para negociar su colocación al frente de À Punt, un puesto que habitualmente se saca a concurso. El dirigente estuvo ilocalizable hasta la citada hora, cuando el agua ya había anegado miles de calles de la provincia y cuando la ministra para la Transición Ecológica y vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, ya había intentado contactar con él telefónicamente hasta cuatro veces. A su vez, la alerta a los teléfonos móviles llegó pasadas las 20:00 horas, a pesar de los reiterados avisos de la AEMET a lo largo de la mañana y de la semana.

 



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