El president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha lamentado este viernes que la CHJ enviara «un simple correo electrónico» para informar de una crecida «brutal» de la rambla del Poyo en la tarde del 29 de octubre, a pesar de que el presidente de la CHJ, Miguel Ángel Polo, participaba de forma telemática en la reunión del centro de coordinación de emergencias.
En ese sentido, Mazón ha realizado balance del despliegue posterior al temporal para atender la emergencia: puntos sanitarios habilitados, actividades de rescate, la activación de los primeros gastos en ayudas para los afectados (de las que ha señalado que ya se han pagado 2,4 millones de euros), medios de limpieza que han retirado 50.000 toneladas de enseres o incluso agradecimiento para oenegés e instituciones que han estado prestando servicios de alimentación o acompañamiento en la zona.
Así, parece que ya ha pasado la explicación de la gestión durante el día de la dana, el asunto crítico, para el que ha utilizado cerca de una hora. En esta, pese a que ha pedido disculpas por los fallos de protocolo, ha centrado las críticas en la Confederación Hidrográfica del Júcar por el «apagón informativo» en el barranco del Poyo.
«Mayor operación de rescate»
Sobre las actuaciones en colaboración con otras administraciones, Mazón asegura que a las 20 horas le llamó «desde Colombia», insiste, el secretario de Estado de Agua, Hugo Morán, para hablar de la situación de riesgo en la que estaba la presa de Forata y que a las 21:30 horas habló con la vicepresidenta del Gobierno, María Jesús Montero, y que hablaron del despliegue de más efectivos. Ha señalado que la UME en ese momento ya estaba «desplegada» en Utiel. Así, incide en que se ha hecho desde entonces la «mayor operación de rescate» de la historia de España y que la Generalitat ha desplegado a todo su dispositivo para «ayudar, curar y reconstruir».